Nada nos hace enamorarnos más de un perfume que su estela duradera. Para las beauty lovers, la persistencia de una fragancia es un factor decisivo a la hora de elegir entre una eau de parfum intensa o una eau de toilette chispeante. Y es que, aunque adoremos las composiciones cítricas, verdes o acuáticas (ligeras y luminosas a más no poder), su fugacidad suele decepcionar. Estas fórmulas, con baja concentración de aceites esenciales, se evaporan con rapidez, sobre todo cuando suben las temperaturas.
Lo cierto es que una de las quejas más repetidas entre amantes de la perfumería es que su aroma favorito desaparece antes de mediodía. Especialmente ocurre con notas volátiles como la bergamota, el pomelo o la menta, cuyo frescor se esfuma al contacto con la piel. Aunque elegir perfumes con buenas fijaciones (con maderas en el fondo, por ejemplo) puede ser una buena estrategia, la dermatóloga Candela Preti ha revolucionado TikTok con un truco simple, casero y efectivo. ¿Lo mejor de todo? No tenemos que gastar nada porque s e trata de un producto que ahora mismo está en el cajón del baño.
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Aplicar el perfume sobre la piel seca y desnuda es uno de los principales errores al aplicar el perfume y por eso no dura todo el día. La doctora Preti recomienda preparar antes la zona con una capa muy fina de vaselina sólida sin perfume. Este gesto sencillo crea una barrera emoliente que "atrapa" el aroma y ralentiza su evaporación, logrando que la fragancia se perciba durante horas, incluso en días calurosos.
Olvídate del cuello o el escote si vas a estar al sol (y si no, también). Las zonas expuestas pueden sensibilizarse con la fotosensibilidad de algunos componentes. En su lugar, quédate con puntos de pulso protegidos como el interior de las muñecas, detrás de las orejas o la parte interior de los codos. Estas áreas mantienen la temperatura corporal y ayudan a difundir el aroma gradualmente. Además, así también evitamos la aparición de indeseadas manchas en cuello y escote.
Además de pulverizar la fragancia sobre el cuello seco, hay otros errores comunes al usar nuestro perfume que hacen que dure menos el olor. Aplicar demasiado cerca, frotar las muñecas o colocar el perfume sobre ropa sintética son prácticas a evitar. En cambio, hidratar bien la piel con una loción neutra antes del perfume o elegir productos complementarios de la misma gama (como geles o cremas perfumadas) potencia el aroma y su durabilidad.
Otro tip poco conocido, pero eficaz, es aplicar el perfume justo después de la ducha, cuando los poros están abiertos y la piel ligeramente húmeda (no mojada, esto es importante). El calor corporal y la humedad ayudan a fijar el aroma más profundamente. Y si vas a usar fragancias ligeras, tienes la opción de reaplicar durante el día con un frasco de tamaño viaje que no pesa nada en el bolso y que te permite oler como si acabaras de salir de casa.
