La perfumería, como la moda o la gastronomía, también vive sus propias tendencias. Cada temporada, un nuevo acorde conquista los tocadores de las fragrance lovers, y este verano 2025 no es la excepción. Si los últimos años estuvieron dominados por la vainilla y las maderas ahumadas, a día de hoy el protagonista indiscutible es el pistacho. Este fruto seco de tono verde intenso ha traspasado las fronteras de la cocina para instalarse en el mundo de las fragancias gracias a su aroma suave, goloso y ligeramente salado, que aporta una cremosidad única.
A medio camino entre lo gourmand y lo amaderado, el pistacho huele a a postres orientales, pero sin resultar empalagoso (si está bien equilibrado, claro está). En realidad, es una nota redonda que despierta los sentidos desde el primer segundo y que gana intensidad con el paso de las horas. En esa línea, un nuevo perfume fresco acaba de aterrizar en el mercado con la promesa de ofrecer una estela adictiva, elegante y, sobre todo, de larga duración: más de ocho horas sin desaparecer. Magnífico para las amantes de los perfumes dulces y frescos que quieren huir de lo que lleva todo el mundo.
El pistacho, el ingrediente de moda en la cocina y la perfumería
Ideo Parfumeurs, una firma nicho para expertas en perfumes
Fundada por Antoine y Ludmila Bitar, Ideo Parfumeurs es una firma de autor con base en Beirut que apuesta por una perfumería elegante, vanguardista y con alma. Con una colección joven pero sólida, la primera fragancia nació en 2016, la marca se inspira en el caos bello y la energía multicultural de la capital libanesa para crear composiciones que desafían las normas. Beirut, con sus contrastes entre tradición y modernidad, ha sido el caldo de cultivo perfecto para dar vida a estos perfumes de espíritu libre. Ideo Parfumeurs trabaja en colaboración con narices como Margaux Le Paih Guérin, Marie Duchêne y la propia Ludmila Bitar. Una de sus últimas creaciones da en el clavo con la tendencia más potente de este verano 2025 si te gustan las fragancias dulces y cremosas.
Baklava Bliss, un perfume fresco y crujiente
Inspirado en uno de los postres más icónicos de Oriente Medio, Baklava Bliss no es un perfume de los que marea. Al contrario: es una reinterpretación moderna, fresca y sorprendentemente ligera del clásico dulce que combina capas de hojaldre, frutos secos y miel. Aquí, el pistacho es el rey absoluto. Abre con una explosión crujiente y verde que recuerda al momento en que rompes la corteza dorada de una baklava recién hecha. Sin embargo, el punto contemporáneo llega rápido: la composición evoluciona hacia un corazón floral especiado y una base almizclada que aporta cuerpo y proyección.
La duración es otro de sus puntos fuertes: más de ocho horas de estela sin perder definición. Un diez para las que buscan perfumes frescos de verano que una editora de belleza tiene fichados. A pesar de su perfil gourmand, no resulta denso ni cargante, lo que lo convierte en una opción estupenda para el día a día. Su frescura verde se funde con el calor de la piel, dejando una sensación envolvente que permanece sin saturar.
Lo interesante de Baklava Bliss es que consigue equilibrar dulzor y ligereza con una estructura impecable. La salida es brillante, casi chispeante, gracias a notas verdes y un toque cítrico. Después, el pistacho gana protagonismo con una textura casi cremosa, sin llegar a lo lácteo. El fondo, amaderado y ligeramente especiado, aporta carácter sin quitarle frescura. ¿El resultado final? Uno de esos perfumes "gourmand" para sumergirte en la dulzura sin saturar a las personas de al lado. Cuesta 130 euros por 50 ml, un precio razonable dentro del universo de la alta perfumería de autor.
Otros perfumes con pistacho entre sus notas
Pistachio Cousin de Les Liquides Imaginaires
Otra novedad que reafirma el reinado del pistacho en perfumería es Pistachio Cousin, de Les Liquides Imaginaires. La nariz detrás de esta creación es Jacek Laszczynski, perfumista que ha combinado pistacho, limón italiano, naranja y bergamota con una base cremosa y especiada. La salida cítrica y luminosa da paso a un corazón floral con azahar y petitgrain, que se funde en una base de maderas nobles como el sándalo australiano y el vetiver. Tiene una textura jugosa, casi efervescente. Su precio es de 190 euros en Abanuc.
