El otoño ha llegado y con él la moda da un inevitable giro hacia tonos más cálidos y estilos sofisticados. Los looks empiezan a construirse por capas, con chaquetas y prendas de abrigo llegando poco a poco a nuestra vida. Incluso nuestro maquillaje y nuestra manicura da un giro hacia tonos más neutros y cálidos. Así que como no podía ser de otra manera, este cambio también afecta a nuestros looks de invitada. La última en demostrárnoslo ha sido Sassa de Osma. La princesa de Hannover acudió el fin de semana pasado en Roma a la boda de Nicolas Niarchos y Malù dalla Piccola. O más bien deberíamos decir que celebraron de nuevo su boda.
El look de invitada de Sassa de Osma
El periodista y heredero griego se ha dado el sí quiero con la artista Malù dalla Piccola en varias ocasiones. Primero lo hicieron en junio en una boda civil bastante discreta, después el pasado mes de julio en una boda religiosa con multitud de invitados. Y ahora han vuelto a celebrar su amor en Roma en compañía de sus seres queridos.
Para la ocasión la princesa de Hannover ha optado por un vestido que parece haber sido diseñado exclusivamente para ella, realzando no solo su belleza natural, sino también su habilidad para ser siempre la mejor vestida allá donde va.
Se trata de un diseño de la marca italiana Luisa Beccaria, toda una oda al exquisito diseño italiano que se caracteriza por sus delicados estampados florales que evocan la nostalgia de un otoño romántico. Cada tramo de tela fluye con una gracia inherente que acompaña los movimientos de Sassa de Osma, proyectando una imagen etérea y sofisticada.
Los detalles del vestido de Sassa de Osma
Lo que hace único a este vestido es su paleta de colores, cuidadosamente seleccionada para reflejar los tonos otoñales más cálidos. Las tonalidades naranjas y tierras predominan, creando un juego visual que capta la esencia de la estación. Unos colores intensos que contrastan con el entorno urbano a la par que aportan una calidez visual que es imposible ignorar.
La estructura del vestido también merece una mención especial. Con una silueta que se ajusta delicadamente al cuerpo de Sassa de Osma, el diseño culmina en una falda vaporosa que añade un toque de feminidad y movimiento. La cintura, sutilmente ceñida, resalta la figura de Sassa, mientras que el largo de la falda juega con la sofisticación y elegancia. Este equilibrio entre estructura y fluidez es lo que hace que el vestido destaque y sea adecuado para eventos de día o noche.
