Lidia Torrent, tras ser madre, decidió no volver a trabajar en Fisrt Dates en busca de nuevos retos profesionales. Su madre Elsa Anka, fue su sustituta en el programa el tiempo que estuvo de baja por maternidad.
Pero el equipo del espacio de Cuatro eligió a una exconcursante de La isla de las tentaciones, Laura Boado, como nueva camarera del restaurante del amor.
Pero lo que muchos espectadores desconocen es que Boado llegó a ser futbolista profesional. Aunque no alcanzó el éxito de las campeonas del mundo como Jenni Hermoso, Alexia Putellas u Olga Carmona, pero sí que jugó en la Segunda División de la Liga F.
"Estaba jugando en esa categoría, pero necesitaba invertir mucho tiempo en entrenar y en jugar, pero no me daba apenas rédito económico, por eso lo dejé", reconoció la gallega.
Boado intentó que el fútbol fuese su futuro, pero se lesionó de la clavícula: "Al final, te vas haciendo mayor, necesitas dinero y, por desgracia, el fútbol femenino no lo da", asegura.
El fútbol en su infancia
La camarera de First Dates comenzó a interesarse en el mundo del fútbol desde muy pequeña, pero no había muchas niñas con las que jugar, ya que en aquella época era un deporte mayoritariamente masculino.
"En las ciudades pequeñas no había equipos femeninos así que, con 7 años tuve que meterme a jugar en un equipo de chicos, donde estuve hasta los 14, que pesé a cadete, y ya no podía seguir con ellos", recuerda.
A esa edad, sus habilidades en la portería llamaron la atención del primer club de fútbol femenino en su ciudad, el C.D Conxo Santiago, y la ficharon, jugando los sábados a fútbol sala y los domingos a fútbol once.
En busca de oportunidades
La gallega se llegó a plantear marcharse a Estado Unidos, donde el fútbol femenino a nivel universitario cuenta con una gran repercusión y en el que otorgan becas a sus alumnas, pero como Boado no logró una se quedó en España.
"Para que te den una beca que merezca la pena tienes que ser muy buena en los estudios y en el deporte. Pero, sobre todo, tener la suerte de que te vean", admite la gallega.
Finalmente, optó por otro camino profesional y terminó en televisión trabajando con Carlos Sobera, Matías Roure y las gemelas Zapata, Marisa y Cristina.
