Las pendientes de las carreteras, a veces pronunciadas y prolongadas, con curvas, con zonas de umbrías y el añadido del frio, pueden además complicar un viaje
Ante las previsiones de alertas por la bajada de temperaturas y la llegada del invierno, es preciso conocer los riesgos invisibles de la carretera más frecuentes que el frio y un mayor número de horas de oscuridad producen en esta época del año.
No debemos olvidar que, en España, las carreteras discurren con la segunda altitud media más elevada de Europa, solo por detrás de Suiza. En invierno en gran parte del país hace frio, en ocasiones mucho. No hablamos exclusivamente de nieve, pero sí de bajas temperaturas, a veces bajo cero, y con grandes diferencias térmicas entre el día y la noche, de hasta 15 grados o más.

Las pendientes de las carreteras, a veces pronunciadas y prolongadas, con curvas, con zonas de umbrías y el añadido del frio, pueden además complicar un viaje. A esta circunstancia es importante añadir que en esta época se circula durante un mayor número de horas sin luz solar.
Cuando las condiciones meteorológicas son adversas, especialmente con la presencia de hielo y nieve en la calzada, la Dirección General de Tráfico (DGT) puede activar niveles de alerta de diferente grado (verde, amarillo, rojo y negro) restringiendo e incluso prohibiendo la circulación de determinados vehículos en las vías.
- Nivel verde (comienza a nevar)
- Nivel amarillo (parcialmente cubierto de nieve)
- Nivel rojo (carretera cubierta)
- Nivel negro (mucho espesor de nieve)

Existe una normativa de la DGT (Instrucción 15/TV-88 de diciembre de 2015) sobre neumáticos con especificaciones de invierno, entre los que también se encuentran los de todo tiempo, y la prohibición de circular con cadenas en determinadas vías, sobre la que rara vez se informa o se recuerda a los conductores.
Esta instrucción indica que no se puede rodar con cadenas cuando no hay nieve, ya que se puede dañar tanto el asfalto como el vehículo y es fácil que se rompan.

Esto sucede en los túneles, por lo que es necesario quitar las cadenas antes de atravesar un túnel o zona sin nieve y volver a ponerlas después si vuelve a haber nieve. El riesgo que conlleva ponerlas y quitarlas varias veces ha llevado a la DGT a prohibir el uso de cadenas en las vías con varios túneles, como es el caso de las A-66 y A-67 que unen Cantabria y Asturias con la meseta. Pudiéndose circular por estas vías únicamente con neumáticos certificados para invierno.
La instrucción 15/TV-88 de diciembre de 2015, supone un gran paso para mejorar la seguridad vial protegiendo a los usuarios y conservando el asfalto y los vehículos evitando los riesgos en determinados casos del uso de cadenas.

¿Qué hay de los neumáticos?
Si en condiciones normales hay que llevarlos de manera correcta y adecuada, en invierno es especialmente importante, por la posibilidad de encontrarse con lluvia, hielo, etc. Los neumáticos en estas situaciones tienen un papel fundamental por su efecto en la frenada y la adherencia con el pavimento.
La presión de inflado de los neumáticos debe ser la que indique el fabricante. Un neumático bajo de presión, entre otros problemas, tiene mayor probabilidad de producir aquaplaning.

Además, es importante comprobar que la profundidad del dibujo sea siempre igual o superior a 1,6mm. Si tiene menos, se deben cambiar los neumáticos.
Los neumáticos estándar o de verano son los equipan la mayoría de los vehículos. Diseñados para garantizar un rendimiento óptimo a temperaturas superiores a 7°C, son especialmente útiles en lugares donde las temperaturas alcanzan a menudo los 40 °C durante periodos de tiempo ocasionales o incluso prolongados.
Si los desplazamientos por carretera son con temperaturas bajas inferiores a los 7ºC (frecuentes en invierno en casi toda la geografía española) o por zonas con abundancia de nieve o hielo, de difícil acceso en invierno (pendientes pronunciadas, carreteras por las que no pasan los vehículos quitanieves, etc.), entonces los neumáticos de invierno son la mejor opción.

Estos neumáticos disponen de un dibujo especial con laminillas en la banda de rodadura y un tipo de compuesto de caucho diseñado para tener un buen rendimiento con temperaturas muy bajas y además tienen un mejor agarre en la nieve o el hielo. Cuando aumenta la temperatura es recomendable sustituirlos por unos de verano, ya que pierden prestaciones.

Los neumáticos de Todo Tiempo o All Season, combinan las características de los neumáticos de verano y de invierno, lo que permite conducir con seguridad tanto en seco como en mojado, tanto en invierno como en verano, así como sobre nieve.
Si se conduce habitualmente por zonas donde la temperatura media invernal es inferior a 7°C en invierno o por carreteras donde nieva esporádicamente entonces los neumáticos “All Season” son una buena elección para conducir con seguridad en todas las situaciones, tanto con frio o nieve como con calor.

Tanto los neumáticos de invierno como los de Todo Tiempo disponen de los marcajes M+S y el símbolo Alpino (3PMSF) que les permiten circular legalmente sin cadenas cuando estas son obligatorias en caso de nivel rojo por nieve.