Muy pocas mujeres están contentas con su pelo. Algunas por su longitud, otras por su forma y muchas otras por, sencillamente, el estado en el que se encuentra. La realidad es que, muchas de nosotras, tendemos a descuidar nuestra melena, mimándola más bien poco. Nos hacemos recogidos con el pelo húmedo, llevamos coletas demasiado tirantes, nos excedemos a la hora del secado, no utilizamos las mascarillas ni el tiempo ni con la frecuencia indicada… Vamos, un sinfín de errores que afectan, de manera directa, a la salud de nuestro cabello.
Entonces, ¿cómo debemos cuidar nuestro pelo? Los numerosos factores a los que está expuesto el pelo, como la contaminación, el frío o las múltiples herramientas de calor que existen, hacen que la rutina para un cabello sano cobre más importancia que nunca.
Hablamos de una rutina capilar diaria donde los productos de cuidado son indispensables, pero donde también debemos tener en cuenta ciertas reglas para aplicar y cuidar nuestra melena antes de todos estos. Gestos diarios que usan los expertos para incorporar a la rutina de cuidado capilar, fáciles y rápidos y con los que podemos mejorar la textura, cuidar las puntas y evitar posibles rupturas de nuestras melenas.
Técnicas profesionales que hoy hemos preguntado a los expertos capilares y recogemos en esta guía con la que, de una vez por todas, podrás presumir de pelazo, incluso, en temporada estival.
Momento del lavado, puntos a tener en cuenta
El cabello, al igual que la piel, tiene memoria y cuidarlo adecuadamente es esencial para mantenerlo sano y fuerte durante más tiempo. Esta rutina empieza desde el paso cero, el baño, donde la melena absorberá los primeros activos hidratantes, con los que verse más limpio y brillante.
Los expertos del Salón YÖY recomiendan “lavar el cabello con agua templada, evitando el agua caliente que puede dañarlo. Además, utiliza un champú pH neutro adecuado para el tipo de cabello y aplica acondicionador después de cada lavado para nutrir el cabello”.
Aplica la mascarilla antes del champú
Las mascarillas se utilizan sobre los cabellos secos, siempre de medios a puntas. “Para beneficiarte al 100% de sus ingredientes, tienes que crear un hamman para tu melena. ¿Cómo? Una vez que has aplicado el producto envuelve el pelo con una película de papel de plástico y una toalla caliente durante 20 minutos.
Después retíralo, pon la cabeza bajo la ducha y emulsiona con los dedos hasta que el producto desaparezca.” explica Diana Daureo, directora y fundadora del centro de peluquería Diana Daureo.
El champú requiere sus fases
Tienes que grabarte esta máxima, porque optimizar este paso es la clave para conseguir una melena bonita y con brillo. Para una limpieza de profesional debes cambiar las proporciones que has manejado siempre: utiliza mucha agua fresca, una cantidad de producto muy pequeña y haz la repartición en tres tiempos (desde la frente hacia la nuca pasando por la coronilla).
“En cualquier caso, evita frotar en exceso el cuero cabelludo, ya que puedes desequilibrar las glándulas sebáceas y retirar demasiados aceites de la superficie. Eso podría desencadenar que tu piel produzca más grasa para mantener el equilibrio natural.” continúa Diana.
El cepillado es un gesto esencial
Debes incluirlo en tu rutina de belleza y realizarlo, al menos, dos veces al día. Cepíllate la melena tanto por la mañana como por la noche. Además, si vas a lavarlo, también debes hacerlo justo antes de utilizar el champú. ¿Por qué? Peinar el cabello es una manera muy eficaz de repartir el sebo de las raíces hasta las puntas.
Aunque no lo creas, esa es la protección natural más adecuada para cuidar las cutículas, y evitar los nudos. Aprovecha para mejorar la microcirculación con un masaje sobre el cuero cabelludo.
El secado no es una alternativa
No lo subestimes, pues un cabello que está mojado es un cabello mate. Lo ideal es que nunca utilices una herramienta de calor a la máxima temperatura ni realices movimientos del pelo en todas las direcciones durante el secado para que no se alboroten las puntas.
“Mientras retiras la humedad, utiliza siempre un cepillo redondo que permita circular el aire por su interior para permitir que se evapore la mayor cantidad de agua sin recalentar las cutículas.Es la forma de conseguir una superficie brillante.” explica Daureo.
Protege el cabello del sol ¡Siempre!
Especialmente en temporada estival, nuestra melena sufre los efectos de la radiación solar, motivando un pelo deshidratado y seco, ¿La solución? Protegerlo a toda costa. “Cuando estés muchas horas expuesta al sol, lo ideal sería que estuvieses debajo de una sombrilla, con sombrero, una gorra si tienes el pelo más corto… y aplica cada hora un protector capilar para protegerlo más en profundidad.
Llévalo siempre en la bolsa de la playa o la piscina por si se te olvida el sombrero, la gorra o la pamela.” comenta el ‘hair designer’ Juandiegoteo.
No duermas con el pelo recogido
No abuses de los recogidos a la hora de irte a dormir, acabará debilitándose por la zona de la goma y puedes desprender hebras de pelo al moverte por la noche.
Cuidado con las decoloraciones
El cabello suele sufrir bastante en esta época del año por diferentes factores: el salitre del mar, el cloro de la piscina, los rayos UVA/UVB, mantenerlo húmedo demasiado tiempo… “En el caso de los cabellos teñidos hay que añadir un factor más. Y es que, debido a que la frecuencia de lavado aumenta considerablemente en estas fechas, suelen perder su coloración antes de lo habitual, ya que el agua, la sal y el cloro penetran en las fibras, dejando escapar los pigmentos.” explican los expertos de Batiste.
Entonces, ¿Cómo podemos solucionarlo? “Utiliza champús y acondicionadores diseñados especialmente para cabellos teñidos. Estos productos ayudan a mantener el color y a mantenerlo saludable. Además, estos tienden a ser más secos, por lo que es importante utilizar tratamientos de hidratación profunda regularmente. Aplicar una mascarilla nutritiva una vez a la semana para mantenerlo suave y sedoso.” sentencian los expertos de Alfaparf Milano.
