¿Y si te dijera que existe una fruta antioxidante (y todoterreno) que está relacionada con el aumento de la libido y (encima) contribuye a retrasar los signos de la edad? Sí, se trata de la mora, un fruto rojo silvestre con grandes (y desconocidas) bondades relacionadas con el sexo y la belleza.
Este fruto, considerado un verdadero superalimento, no solo deleita nuestro paladar, sino que también ofrece beneficios extraordinarios para nuestra salud y bienestar. Con su origen en Europa, Asia y América del Norte, la mora ha sido venerada a lo largo de los siglos tanto en la cocina como en la medicina tradicional.
El sabor de la mora es característico y un tanto peculiar. Sin embargo, tomar frutas antioxidantes (y en concreto las moras) es un hábito que llevo practicando bastante tiempo y me he dado cuenta de que no solo contribuye a mi bienestar alimenticio, sino que ha aumentado mi deseo sexual y, de paso, me está ayudando a lucir una piel más bonita y prevenir el envejecimiento.

Y esto no es que lo diga yo, sino que expertos, como la farmacéutica Reme Navarro, experta en nutrición y dietética y Co-fundadora de Mifarma, aseguran que “las moras tienen un alto contenido en fitoquímicos, algo que mejora no solo el deseo, sino también el rendimiento sexual”.
Además, Paula Martin Clares, farmacéutica, nutricionista y autora del libro La salud de tu piel está en lo que comes, también avala el aumento del deseo sexual gracias a las moras. ¿El motivo? Su alto contenido en zinc, un mineral clave en la producción de testosterona.
Por la parte del envejecimiento, la experta Paula Martín asegura que la mora “es uno de los alimentos más antioxidantes que existen. Esta fruta contiene vitamina C, E y carotenos, que protegen las células de la piel de los daños ambientales, como la radiación solar o la contaminación. Además, inyectan una luminosidad preciosa en la piel”.
Otros beneficios de las moras que (quizá) desconocías
Y si pensabas que había desvelado todas las bondades de esta fruta afrodisíaca, espera cuando descubras que, también, tiene un gran poder antiinflamatorio, ideal para personas que padecen afecciones cutáneas, como la rosácea o la dermatitis atópica.
“Las moras, al tener altas concentraciones de antioxidantes, reúnen propiedades antiinflamatorias. Esto es muy bueno para ciertas patologías de la piel, como la rosácea o dermatitis, porque estas afecciones cursan con inflamación. De ahí que necesitemos ciertos alimentos antiinflamatorios en nuestra dieta que nos ayude a reducir la irritación”, detalla la farmacéutica y nutricionista Paula Martín.
Asimismo, el propio Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación recomienda el consumo de estos frutos rojos silvestre. ¿El motivo? Su alto contenido en fibra, lo que mejora el tránsito intestinal. Además, contiene una buena dosis de calcio, hierro y potasio, minerales que contribuyen a la salud de nuestros huesos, cerebro y corazón.
“Pero lo que hace de la mora una fruta valiosa son sus grandes cantidades de pigmentos naturales (antocianósidos y carotenoides) de gran poder antioxidante, que refuerzan el sistema inmunitario y retrasan el envejecimiento. Su sabor evidencia su contenido en ácidos orgánicos, como el ácido oxálico o el málico”, detallan desde el Ministerio.
Por último, su poder saciante (y muy bajo en calorías) ha posicionado la mora como uno de los superalimentos de moda. De hecho, se ha considerado la fruta, por excelencia, a incluir en la dieta de la longevidad. Sí, se considera el fruto rojo ideal para vivir más (y mejor).