Elegir un perfume de verano puede parecer sencillo, pero en realidad es todo un arte. La clave está en encontrar una fórmula que refresque sin perder carácter, que evoque vacaciones, piel salada y atardeceres infinitos, pero sin caer en clichés. En esta época, las notas más deseadas suelen ser las cítricas (como el limón o la mandarina), los toques florales exóticos como el ylang-ylang o la gardenia, y por supuesto, el coco, esa nota que huele a escapada al trópico pero que, cuando se combina con inteligencia, puede resultar inesperadamente sofisticada.
Un perfume para las que sueñan con el paraíso
Este año me propuse encontrar un perfume que reuniera todo eso: frescura, elegancia y un punto dulce que no empalagase. Y lo encontré. Se trata de una fragancia de Kayali que lo tiene absolutamente todo: un equilibrio olfativo exquisito, ese toque gourmand justo y necesario, y un formato mini de 10 ml que lo convierte en el compañero ideal para escapadas de verano, neceseres repletos de productos multitarea (mis favoritos cuando se trata de viajar ligera) y bolsos en los que encajar todo lo necesario.
Maldives in a Bottle Ylang Coco | 20 de Kayali, una fragancia tan irresistible como su nombre
Reconozco que siempre he tenido debilidad por los perfumes con coco, pero reconozcámoslo: no todos son iguales. Algunas fórmulas caen en lo previsible, otras en lo excesivamente dulce. Pero Maldives in a Bottle Ylang Coco | 20 va más allá. Es, como sugiere su nombre, una invitación a soñar con islas lejanas, aguas cristalinas y noches bajo palmeras. Sin embargo, no es un perfume fácil: tiene matices que lo hacen interesante, una estructura que lo eleva por encima del simple "huele a playa". Sus notas así lo confirman. Abre con un soplo aromático de romero y limón que refresca de inmediato, un guiño herbal y cítrico que sorprende y engancha. En el corazón, el ylang-ylang se mezcla con un inesperado acorde de plátano, creando una sensualidad solar y cremosa que invita a cerrar los ojos y dejarse llevar. Y cuando parece que no puede mejorar, aparece la leche de coco como base envolvente, suave y reconfortante, el toque final que lo convierte en pura adicción.

Lo más fascinante de esta fragancia es su evolución. Empieza brillante, casi chispeante, y termina siendo cálida y envolvente, como si pasaras del primer chapuzón del día al momento en que el sol se oculta. Bajo mi punto de vista, es genial para las que sienten devoción por los perfumes florales nada típicos que merece la pena probar esta primavera, con un punto tropical y afrutado que lo hace absolutamente único. El precio en Sephora es de 32 euros por 10 ml y de 110 euros por 50 ml.
Otros perfumes en los que el coco se coloca en el epicentro de la ecuación
Born in Roma the Gold Donna de Valentino

Pero si hay un perfume que ha conseguido mezclar sofisticación italiana con una dulzura tropical perfectamente medida, ese es Born in Roma the Gold Donna de Valentino. El coco no es inmediato, pero cuando aparece, lo hace con una elegancia que conquista. Abre con mandarina jugosa, vibrante, luminosa. La gardenia aporta cuerpo, profundidad y esa calideez impoluta tan característica de las composiciones florales bien construidas. Y al final, el coco se posa con delicadeza, como un velo cremoso que redondea toda la fragancia sin robar protagonismo. El precio es de 160 euros.
Virgin Island Water de Creed

Ahora bien, si lo tuyo es el lujo sin filtros, el exotismo llevado a la máxima expresión y ese toque exclusivo que solo unas pocas marcas consiguen, tienes que probar Virgin Island Water de Creed. Huele literalmente a vacaciones de lujo en el Caribe: desde los primeros segundos, la combinación de coco, lima, bergamota blanca y mandarina siciliana te teletransporta a una playa de arena blanca, con cóctel en mano. El corazón es especiado y floral a la vez: jengibre, ylang-ylang, jazmín indio e hibisco. Todo está medido con una precisión deliciosa. Y en el fondo, el ron blanco, el azúcar de caña y el almizcle hacen que el perfume se vuelva adictivo. El precio es de 205 euros.