Miedo a que nos dejen, a decir que no a ese plan que no te apetece... ¿Por qué tenemos miedo a cosas tan sencillas?
¿No te ha pasado alguna vez que te has imaginado a ti misma diciendo que "no" o has ensayado mil veces una conversación en el espejo y cuando ha llegado el momento de la verdad no has sido capaz de reproducir ni una sola de las palabras que te habías planificado? Si a ti también tus miedos al ridículo, a enfrentarte a un superior, a decir que no a una amiga te han dejado petrificada... Seguro que te interesa lo que te vamos a contar ahora.
En la era del empoderamiento de la mujer, en la que somos capaces de hacer, decir y conseguir lo que nos propongamos, no podemos dejar que la parte más débil de nosotras mismas, nuestras sombras más oscuras, nos frenen. Hoy tenemos el firme propósito de enseñarte a alzarte, quererte y valorarte porque la vida es para nosotras, para ser felices, para brillar con nuestra mejor versión y llegar hasta donde queramos llegar.
Para conseguir este fin acudimos a una coach, experta en dar voz a las mujeres y que lucha porque la luz de cada una de nosotras ilumine el camino que nos hayamos trazado. Magdalena Comas Coll, coach de Belight, nos explica cómo funcionan los miedos "el miedo es una emoción que puede protegernos de un peligro real, pero, en la mayoría de los casos, el miedo habita en el futuro y es creado por nuestra mente. Esta emoción nos paraliza y nos lleva a la inacción".
¿Qué tipos de miedos hay?
"Hay muchos tipos de miedos que nos limitan (miedo a ser diferente, a estar solteras, a no ser aceptadas, miedo al cambio laboral, miedo a decir las cosas, etc.) pero si se analizan en profundidad se pueden englobar dentro del miedo a la pérdida y miedo al fracaso". Magdalena Comas nos explica que les restan vigor a nuestra vida y, por tanto, debemos tratar de poner soluciones. Y ese es nuestro objetivo de hoy, junto a ella vamos a explicarte cómo plantarles cara y algunos trucos para que consigas frenar su poder sobre ti.
5 claves para afrontar los miedos, ¡plántales cara!

1. Reconoce el miedo y acéptalo
Ignorarlo solo hará que se haga más fuerte y genere en ti un sentimiento de frustración por no haber intentado gestionarlo. Sacarlo, examinarlo en detalle e identificar de dónde viene es la clave para así saber que tú le controlas o él a ti.
Pregúntate: ¿Qué me da miedo exactamente y por qué motivo?
2. Pregúntate a ti mismo, ponte en la peor situación y escribe brevemente cómo lo afrontarías
- ¿Es un miedo fundado o infundado?
- ¿Qué es lo peor que puede pasar si emprendes?
- ¿Cómo podrías evitar que eso sucediera?
- ¿Qué pasaría si cambias de trabajo?
- ¿Qué pasa si te dicen que no a una propuesta en una reunión?
- ¿Qué ocurre si no eres aceptado en el grupo?
- ¿Qué pasa si dices que NO?
Repítete a ti mismo varias veces con los ojos cerrados la siguiente afirmación: “Yo puedo afrontarlo”. A la vez, visualiza que consigues superarlo y percibe cómo te sientes y la emoción que te viene. Nuestra realidad exterior es un reflejo directo de nuestros pensamientos y creencias. Recuerda, asimila y empieza a asumir que cambiando nuestros pensamientos, cambiamos nuestra realidad.
3. ¡Atrévete!
¡Siente el miedo y actúa de todas formas!
Truco: Anota en un papel aquellas oportunidades que ganas afrontando el miedo y aquello que pierdes si no lo intentas.
¿Por qué? Te darás cuenta que el no intentarlo solo conlleva a que el miedo se incremente y el valor en desafiarte cada vez sea menor.
Ponlo en práctica: Elige uno de los miedos que no sea muy complicado y atácalo con tareas factibles de realizar. ¿Qué tres acciones podrías hacer para afrontar ese nivel de miedo que te impide avanzar? ¿Cuándo vas a empezar?
Recuerda: No actuar tiene, en ocasiones, un precio más elevado que actuar.
4. Vive el "aquí y ahora"
Nos preocupan demasiado los “y si fracaso” “ y si me dejan y me quedo sola”, “y si me rechazan por ser diferente”... En la mayoría de los casos estos pensamientos están proyectados en el futuro. Cuando vives el presente, le quitas fuerza al miedo, que es la incertidumbre a lo que pueda pasar.
¿Por qué nos sucede esto? ¿Por qué nos escondemos tras estas preguntas? ¿Son excusas para no avanzar? Magdalena Comas nos explica que, a veces, tenemos anclajes del pasado que nos hacen tener patrones limitantes de conducta en el presente por miedo a que nos ocurra lo mismo. ¡Libérate de tu pasado y vive el momento!
¿Cómo? La simple consciencia del momento, la respiración y el reconocimiento de tus pensamientos te ayudarán a estar más presente.
5. Actitud positiva
Esto suena a tópico y a consejo más fácil de decir que de realizar pero tiene un sentido. El "no puedo hacerlo" genera bloqueo e inacción a enfrentarte a la situación. Es importante tener un tipo de energía que te ayude a avanzar hacia la acción.
Nos aconsejan, por tanto que cambiemos el: "no puedo", "es imposible", por: "yo quiero", "yo puedo", "yo soy capaz".
Y ahora te preguntamos: ¿Vas a elegir el SÍ o el NO?
Elegir el SÍ es ganar la batalla a tus dudas y miedos. Si tomas acción, el miedo se evapora y genera la confianza de que llevas las riendas de tu vida, eres el protagonista.
Es tu momento, planta cara a tus miedos

Tras esta mini sesión de coaching - que estamos deseando que pongas en práctica - concluimos con algunas máximas. Debemos asumir, porque es parte del crecimiento y desarrollo personal y humano que "cada paso hacia delante que damos supone tener que asumir un cierto riesgo que genera miedo", y continúa "a mayores pasos, mayores riesgos. Si en estos momentos sientes que tienes miedo, es que estás en buen camino, estás movilizándote hacia la acción".
Cada paso que demos, cada trabajo nuevo que afrontemos, cada vez que salgamos de nuestra zona de confort sentiremos miedo y ganas de volver a escondernos tras nuestro caparazón, como tortugas ante un agente externo y reconocido. Pero no debemos dejarnos vencer por lo que no controlamos o se escapa a nuestro conocimiento, todo lo contrario, esa sensación de incertidumbre (una de las facetas del miedo) es la que nos hará crecer y ser mejores.
No nos podemos arrepentir ni de ser valientes ni de luchar por lo que creemos que nos merecemos. Puede que tu miedo capital sea estar sola o enfrentarte a la soledad, pero... Te mereces ser feliz y para ello debes quererte y respetarte a ti misma. Solo cuando tú te quieras a ti misma y te entiendas y comprendas, alcanzarás el bienestar, no dejes que éste dependa de otras personas. Elimina ese freno, anula ese miedo.
Cuando dudes, piensa en estas frases
Nelson Mandela
"El hombre valiente no es aquel que no siente miedo, sino aquel que conquista el miedo"
Paulo Coelho
"Cuantas cosas perdemos por miedo a perder"
Marianne Williamson
"Nada te ata, excepto tus pensamientos. Nada te limita, excepto tus miedos. Nada te controla, excepto tus creencias"
Franklin D. Rooselvelt
"A lo único que tenemos que tener miedo, es al propio miedo"