El cuarto en la línea de sucesión al trono español ya tiene 25 años. Felipe Juan Froilán de Marichalar y Borbón sopló ayer las velas y, para celebrarlo, su hermana Victoria Federica, la ya conocida como “la influencer de la Casa Real” sacó a relucir la imagen más tierna de cuando ambos eran pequeños.
A pesar de que Victoria y Froilán vivan a muchos kilómetros –ella está en Madrid y él vive con su abuelo, el rey emérito Juan Carlos I, en Abu Dabi– la hija menor de la infanta Elena ha querido hacer público el amor que siente por su hermano en uno de sus días más especiales, el día que cumple un cuarto de siglo.

“Millones de felicidades, mi niño. Te quiero”, escribía Victoria Federica sobre una imagen que ha sacado del baúl de los recuerdos en la que el mayor de los hermanos debe tener alrededor de dos años y la pequeña tan sólo unos meses de vida.
Con esta imagen, además de los hechos y actos de Victoria Federica y Froilán a lo largo de los años, se demuestra que el vínculo entre hermanos es irrompible. Juntos afrontaron la separación de sus padres –la infanta Elena y Jaime de Marichalar– allá por 2007, cuando desde el Palacio de la Zarzuela se informó de “el cese temporal de la convivencia de los duques de Lugo”, además de los innumerables huracanes mediáticos en los que se han visto envueltos y ahora, la distancia a la que están sometidos por vivir cada uno en un país.

De todas formas, Victoria Federica y Friolán de Marichalar se ven bastante. La última vez que se tuvo noticias de que los hermanos habían estado juntos fue el pasado 16 de junio, cuando ambos asistieron a la graduación de su prima Irene Urdangarín en Ginebra.