Con su estilo único, la icónica cantante británica de origen kosovar ha conquistado al público del Mad Cool en la primera de las cuatro noches que dura el festival. No solo su poderosa voz y sus pegadizas canciones han sido objetivo de todas las miradas en una noche en la que Dua Lipa se colocaba como cabeza de cartel, sino que su estilo único y su presencia en el escenario la convirtieron en la gran protagonista de la noche al ritmo de algunos de sus temas clásicos como 'Houdini', 'One Kiss' o 'New Rules', con los que hizo bailar a más de 55.000 personas.
Cuando una diva del pop como ella se sube al escenario, una de las mayores incógnitas que surge en las horas previas al concierto es: ¿con qué look nos deslumbrará? Una pieza icónica, que está volviendo con mucha fuerza, se hacía con todo el protagonismo en lo que al vestuario que refiere. Estamos hablando del cinturón con tachuelas, que se convirtió en un símbolo de la moda punk y rock de los años 70 y 80, y años después, en los 2000, se convirtió en un imprescindible en el armario de cualquier adolescente. Aunque lo hemos visto de mil colores, formas y combinado con prendas de todo tipo, la cantante optó por uno de los más clásicos: el cinturón de tachuelas negro.
Aunque ya sabemos que la versatilidad de Dua Lipa no tiene límites, de 'Barbie' a las pasarelas con Donatella Versace, ver a Dua Lipa vistiendo esta prenda es lo último que nos podía faltar para terminar de confirmar que el resurgimiento de la moda de los 70 y 80 ya es una realidad, y el cinturón con tachuelas, lejos de ser una excepción, se está convirtiendo en uno de los grandes protagonistas. Su capacidad para combinarlo con elementos más modernos ha demostrado que puede ser un complemento de lo más versátil para aportar un toque retro.
El cinturón de tachuelas antes de Dua Lipa
La historia del mítico cinturón con tachuelas, la tendencia que está pisando fuerte este verano en los festivales, se remonta varias décadas atrás. Tiene su origen en el movimiento punk de los años 70, cuando era un accesorio representativo de las bandas de punk rock y sus seguidores. Era una forma de rebelarse contra las normas y expresarse de forma desafiante. Los primeros eran simples cinturones de cuero adornados con tachuelas metálicas que se encontraban en tiendas de ropa punk.
Una de las primeras mujeres en vestir el cinturón con tachuelas en los años 70 fue Dobbie Harry, vocalista principal de la banda de rock estadounidense Blondie. El suyo era uno de los modelos más clásicos, en los que ha encontrado inspiración Dua Lipa.
Con el paso de los años, el diseño se fue diversificando y se incorporaron nuevos tipos de tachuelas de diferentes formas y tamaños. En los años 80 se convirtió en todo un símbolo de moda juvenil, y diferentes subculturas y movimientos musicales fueron adoptando esta prenda y adaptándola a su propio estilo. Su máximo auge llegó cuando ídolos de la época como Joan Jett o Sex Pistols empezaron a lucirlo, llegó su momento de máxima popularización.
Más adelante, llegando a los años 2000 trascendió y la clásica prenda punk fue adoptada por el mainstream. Al clásico cuero negro con tachuelas, se unieron todos los colores que pudiésemos imaginar, y llegaron hasta las pasarelas de moda y a los looks de las celebrities de todo el mundo. Uno de los ejemplos más clásicos y recientes, que marcó a toda una generación e hizo que millones de adolescentes alrededor de todo el mundo se hiciesen con su cinturón de tachuelas, Avril Lavigne.
Además, la cantante canadiense será la encargada de poner el broche de oro al Mad Cool, como cabeza de cartel en el último día del festival de música más importante de la capital. Conocida por su distintivo estilo pop-punk de los 2000, no nos sorprendería que Lavigne se uniera a la tendencia de traer de vuelta esta prenda que tanto le ha representado. Fue un elemento clave en sus icónicos looks, y podría consolidar aún más el resurgimiento de esta tendencia nostálgica.
