La princesa Leonor vivirá uno de sus años más especiales. Hace tan solo unas semanas se encontraba en España con motivo de las tradicionales vacaciones de Navidad. Llegó un frío 9 de diciembre y días después se produjo un inesperado movimiento por parte de Casa Real: Leonor iba a protagonizar su primer acto en solitario. Un paso más en su carrera a fondo para ser en un futuro la Reina de España.
Así fue, la heredera al trono presidió un encuentro que tuvo lugar en la Sede de la Cruz Roja de Madrid, entidad en la que su madre, la reina Letizia, es presidenta de honor. De hecho, con su estilismo le hizo un guiño al tomar prestado de su extenso vestido una blazer de cuadros que combinó con un jersey burdeos y pantalones negros. Una vez terminaron sus días de descanso, Leonor volvió a hacer las maletas y cogió un vuelo destino Gales.
Enclave en el que está cursando el segundo año del Bachillerato Internacional. Este pasado miércoles, 25 de enero, la hija de los Reyes, Felipe y Letizia ha disfrutado de una dulce jornada. Ha hecho un parón en sus estudios y ha celebrado una tradición galesa con todos sus compañeros del internado. A través de las redes sociales del centro, han compartido una fotografía en la que aparecen unas apetitosas galletas en forma de corazón, en honor a los enamorados.
Cada 25 de enero se celebra esta costumbre, que se conoce como el Día de St. Dwynwen. Santa Dwynwen era una princesa galesa del siglo IV que no fue todo lo afortunada que quería en el amor, ya que nunca le llegaba. Actualmente, ella se ha convertido en la patrona galesa de los amantes. Se puede decir que el Día de Santa Dwynwen es un símil del Día de los Enamorados que celebramos en España, ya que la temática principal es el amor. Las personas intercambian tarjetas y regalos, además de pasar tiempo con sus seres queridos.
Haciendo un poco de historia, esta práctica se remonta al siglo XVI, que es cuando la gente se regalaba cucharas de madera talladas a mano. Se cree que sus orígenes vienen de la historia marítima de Gales, cuando los propios marineros tallaban estos regalos durante sus largos viajes por alta mar Todavía se pueden comprar estas «cucharas de amor» y se consideran regalos muy sentimentales.
No será hasta el mes de abril, cuando tenga lugar la Semana Santa, cuando la princesa Leonor vuelva a pasar unos días a España con su familia, pero no estará mucho tiempo porque tiene que preparar los exámenes finales que serán tan solo unas semanas después. Por ahora, y como todavía quedan unos meses, no se sabrá hasta bien llegada la fecha si la Princesa hará una aparición pública. Será la agenda de Casa Real quien marque los tiempos.
Una vez termine sus estudios en Gales, la nieta de don Juan Carlos cogerá el testigo a su padre, el rey Felipe VI y continuará su formación en el ámbito militar que concluirá su paso por el buque escuela de la Armada Juan Sebastián de Elcano. Una nueva etapa que, sin duda, supondrá un importante reto personal para la princesa de Asturias. Y no solo eso, porque el calendario de la Familia Real española tiene un día muy señalado y, la verdad, no es para menos. El próximo 31 de octubre, la princesa Leonor celebrará una nueva vuelta al sol, pero no una cualquiera, sino que cumplirá la mayoría de edad, por lo que podríamos presenciar su gran puesta de largo como hacen en otros países, como ocurrió hace unos meses cuando la Familia Real noruega celebró por todo lo alto los 18 de la princesa Ingrid Alexandra. Fue entonces cuando la royal lució por primera vez una tiara. Un momento histórico para las monarquías europeas. Cabe destacar también que, durante los últimos años, Leonor ha sufrido una gran transformación, no solo a la hora de enfrentarse para dar un discurso, sino física también. Ahora, que se encuentra en plena adolescencia, está comenzando a perfilar su estilo tanto a la hora de vestir como en el aspecto beauty, eso sí, ha demostrado (con creces) que está siempre al tanto de las últimas tendencias.
