Se ha hablado mucho en etas últimas semanas sobre cómo iba a ser la nueva vida del príncipe Harry y Meghan Markle, que decidieron dejar atrás Reino Unido y establecerse en Los Ángeles. Una ciudad que la exactriz conoce muy bien por su profesión y en la que parecen estar muy a gusto, y eso que es uno de los lugares del mundo con más paparazzi por metro cuadrado.

Si bien es cierto que ya llevan allí un tiempo, el confinamiento impuesto por el coronavirus ha puesto en pausa muchos de sus planes, como le ha pasado a mucha gente. De momento, se conoce bien poco lo que están haciendo, pero se acaba de desvelar un detalle muy importante, Meghan Markle ha estado trabajando en secreto.
Cuando ella y el príncipe Harry decidieron desvincularse de la Casa Real británica, muchos entendieron que también dirían adiós a las organizaciones con las que habían trabajado. Sin embargo, no es así. De hecho Meghan sigue ligada a la organización benéfica Mayhew, que se ocupa del bienestar de las mascotas abandonadas, tanto que sigue al pie del cañón. Así al menos lo asegura una persona que trabaja en la fundación al medio ‘Newseek’, al que ha asegura que “la duquesa está en contacto y trabajando con Mayhew en este momento. Mucha gente desconoce del trabajo que hace Mayhe. No es caridad animal. Son muchas personas que también apoyan a la comunidad”.

Esta fuente asegura que el apoyo de Meghan iría centrado en ayudar a la economía de la asociación, pues sus ingresos provienen principalmente de donaciones y de eventos públicos de recaudación de fondos, que se han cancelados debido a la pandemia de coronavirus. “Es una gran defensora de los animales y el bienestar animal”, dijo sobre Markle la relaciones públicas de la organización, Sarah Hastelo, hace un tiempo.
Tan involucrada está en el mundo animal que el verano pasado Meghan Markle escribió una emotiva carta en la que animaba a adoptar una mascota, compartiendo su experiencia. “Soy la orgullosa dueña de perros rescatados y sé por mi experiencia personal que traen mucha felicidad. Adoptar una mascota es una gran decisión que conlleva mucha responsabilidad, pero tiene una infinita respuesta a la inversión”.