La crisis sanitaria mundial ha afectado a los bolsillos de los empresarios, que buscan ahora una nueva forma de remontar sus negocios para salir adelante. Entre ellos se encuentra el torero Jesulín de Ubrique, quien va a poner en marcha, a partir del año próximo, una aventura empresarial, que espera le sea muy rentable. El escenario elegido es su finca de Ambiciones, que adquirió hace tres décadas y que llevaba años sin habitar.
El proyecto todavía no se ha llevado a cabo, pero ya cuenta con su propia página web, eventosambiciones.com, para que todos aquellos interesados puedan ir viendo todas las posibilidades que ofrece el lugar, situado en Prado del Rey, Cádiz.
Se alquila para eventos como boda, comuniones, y bautizos, pues cuenta con su propia capilla privada, pero también es ideal para eventos de empresa. Además, se puede realizar una visita por la dehesa en Quad con sabor andaluz, pues además de ver de cerca los toros bravos y conocer las faenas diarias del mayoral, también se podrá degustar un almuerzo con productos típicos de la zona. Toda una experiencia gastronómica después de un día intenso de campo.

Vamos a recorrer la finca Ambiciones, que cuenta con amplios salones interiores decorados con cabezas de ganado en sus paredes, así como las terrazas al aire libre para los días más cálidos del año y la plaza de tientas, donde pasárselo en grande con los amigos, mientras te pones delante de una vaquilla y demuestras tus dotes con el capote. La propiedad cuenta con diez dormitorios, gimnasio, sala de juegos y sala de trofeos.
En este lugar vivieron durante años la familia de Jesús Janeiro y fueron muy felices hasta que llegaron los problemas. Ahora, la propiedad de 300 hectáreas va a recuperar el esplendor de aquellos años pasados en los que hasta la matriarca del clan, Carmen Bazán, se atrevía a ponerse delante de un astado. La finca todavía se está sometiendo a algunas reformas para que en breve pueda empezar a funcionar como negocio empresarial y allí estarán a cargo Jesulín y su esposa, María José Campanario, así como Humberto, el hermano mayor del diestro y un familiar de María José.
300 hectareas
La finca de Ambiciones cuenta con 300 hectáreas que a partir de unos meses van a poder alquilarse para eventos. Cualquiera que lo desee puede celebrar allí su boda o pasar una noche en la cama en la que durmió Belén Esteban.

Muchos espacios abiertos
En la web destacan este patio como un lugar en el que poder celebrar eventos. Decorado con columnas en color albero resulta ideal para disfrutar al aire libre de grandes acontecimientos como hicieron antaño los Janeiro.

Capilla privada
La dehesa cuenta con su capilla privada para celebraciones religiosas. Es pequeña, pero con mucho encanto y tiene hasta cristaleras que dejan entrar la luz del sol.

El toro, siempre presente
En la finca de Ambiciones, el toro ocupa un papel muy destacado y por ello se puede ver una imagen realizada en bronce dentro de uno de los patios de la propiedad.

Momentos inolvidables
En Ambiciones la familia Janeiro ha vivido momentos inolvidables como éste en el que la matriarca del clan sale al albero y se enfrenta a una vaquilla.

Humberto Janeiro, el precursor
Jesulín compró la dehesa animado por su padre, Humberto Janeiro. Ahora, el patriarca ya no podrá ver el proyecto empresarial, pues fallecía el pasado mes de agosto, debido a su delicado estado de salud.

Centro de la noticia
Seguro que habrá mucha gente interesada en alquilar una de las habitaciones de la casa y conocer de cerca el lugar del que tanto se ha hablado. Donde Belén Esteban vivió con Jesulín y donde María José Campanario planeaba volver a casarse con Jesús.

Vida de campo
Si bien se movían por esas tierras en tractor, ahora los visitantes lo harán en quad y recorrerán la finca en la que habitan un gran número de cabezas de ganado.

Un lugar muy especial
Hablar de Ambiciones es hablar de Jesulín y de muchos momentos inolvidables que nos ha dado en el interior de la propiedad, que adquirió hace 30 años.
