Las mejores ideas eróticas para desatar la pasión con tu pareja

Si la rutina, la ausencia de comunicación o la falta de interés empiezan a imponerse en tu relación, no lo dudes, esta primavera es el momento de retomar el control.
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Tras varios años en una relación con tu pareja, es bastante normal que no consigas notar la pasión y el ardiente deseo del principio de la misma. Recordarás con algo de nostalgia los primeros meses en los que no podíais pasar más de una tarde sin hacer el amor.  Desde entonces, la llama del amor sigue presente, pero puede que la del deseo sexual no sea tan fuerte como debería.

Comunicación y conexión en la pareja

Pero ojo, esto no significa que todo esté perdido para siempre, sino que puede que el sexo con tu pareja necesite un latigazo (en todos los sentidos), un nuevo enfoque o que necesitéis reinventaros... ¿La clave? Antes de probar o intentar cualquier cosa nueva, tenéis sin duda alguna que comunicaros y hablar. Aunque pueda parecer algo básico y tengas mucha confianza con tu pareja, puede que no siempre te atrevas a decirle lo que realmente quieres o sientes.

¡Y eso es un grave error! No te avergüences de pedirle cosas que te excitan, aunque no sean habituales o 'normativas' y procura ser abierta y comprensiva ante sus gustos y deseos. La comunicación abierta es la base de cualquier relación sólida, especialmente cuando se trata de mantener viva la llama del deseo. Hablar sobre lo que os gusta y lo que no, así como establecer límites claros, es esencial para evitar malentendidos y garantizar que ambos os sintáis cómodos.

(Foto: David-Prado en iStock)

No se trata solo de hablar de sexo, sino de todo aquello que os une como pareja: la comunicación efectiva puede transformar vuestra relación, haciéndola más rica y satisfactoria en todos los aspectos. Eso sí, recuerda que nunca debes hacer nada por obligación. Para una vida sexual feliz, ambos tenéis que tener claro qué os apetece y cuáles son vuestros límites.

De esta forma ninguno de los dos se tendrá que ver en una situación que no le haga sentir a gusto o bien. Y aunque ya lo sabrás de sobra, es también el momento de decir adiós a tus complejos y a tus bloqueos sexuales. Tu pareja te quiere tal y como eres, por lo que no es necesario que ocultes estas zonas de tu cuerpo que tanto te desagradan. Si confías en ti y te sientes sexy, lo notará y vuestra relación será más intensa.

Romper la rutina y redescubrir el deseo

Caer en la rutina es algo normal en las parejas, pero esto no quiere decir que la chispa se apague para siempre una vez que empieza a desvanecerse, sino que si intentamos romper con la monotonía y abrirnos a nuevas experiencias podemos mejorar la relación. Una forma efectiva de romper la rutina es planificar actividades que os saquen de vuestra zona de confort: sean escapadas espontáneas o noches temáticas en casa, cualquier cambio en la rutina diaria puede ser un catalizador para reavivar la pasión.

La clave está en ser creativos y estar dispuestos a experimentar siempre, como decíamos, respetando los límites de cada uno. Aunque también es importante volver a apreciar las pequeñas cosas que te atrajeron en un principio puede ayudarte a reconectar emocionalmente: a veces solo se necesita un cambio de perspectiva para recordar por qué os enamorasteis y lo que hace que vuestra relación sea única y especial.

(Foto: santipan en iStock).

15 ideas eróticas para reavivar tu relación

Antes de que decidas tirar la toalla y te conformes, toma nota de estas 15 ideas eróticas, sencillas y muy poco costosas que te proponemos para reavivar la llama y desatar la pasión esta primavera. Ya sabes que la primavera la sangre altera... Fuera complejos, prejuicios y otros miedos. Es el momento de reconquistar y disfrutar de tu vida sexual. Como os lo merecéis.

Solos en el mundo

(Foto: Oleh_Slobodeniuk en iStock).

Un viaje en pareja siempre funciona: solos, en un nuevo sitio y un paisaje desconocido y de ensueño... ¿qué más se puede pedir? Todos los ingredientes estarán reunidos para teneros ganas de nuevo. Y no es necesario que sea un destino exótico en el que dejaros miles de euros, a veces una simple escapada rural es suficiente para crear una atmósfera de intimidad y deseo.

Durante el viaje, aprovecha para desconectar de las tecnologías y centrarte en tu pareja. Dedicad tiempo a actividades que fomenten la cercanía entre ambos como paseos tranquilos, cenas románticas o simplemente disfrutar del silencio juntos. Quizás esos momentos compartidos y de estar solo vosotros sean el catalizador que necesitáis para reavivar la llama.

Cambiar los roles

(Foto: idal en iStock).

¿Eres activa? Sé pasiva. ¿Eres pasiva? Sé activa. Si tenéis "roles" muy definidos a nivel sexual (de forma consciente o no), es el momento de probar un cambio. Toma la iniciativa si siempre lo hace tu pareja o déjalo/a al mando, ya verás cómo se sorprenderá para bien. Este cambio no solo puede ser excitante, sino que también puede proporcionar una nueva perspectiva sobre el placer y la intimidad.

Y aunque hablamos sobre todo a nivel sexual, en realidad este intercambio de roles puede extenderse más allá del dormitorio: probar nuevas actividades o asumir diferentes responsabilidades en la vida diaria puede ayudar a romper la rutina y fomentar una mayor comprensión y empatía entre ambos. Este tipo de exploración puede enriquecer la relación y abrir la puerta a nuevas experiencias y niveles de intimidad.

Visitas sorpresas

(Foto: mediaphotos para iStock).

Seguramente ambos tendréis sin duda alguna una agenda repleta y pocos momentos para coincidir. Sabemos que puede ser difícil, pero intentad convertir este problema en una oportunidad con visitas sorpresas por ejemplo en el trabajo o en otras actividades. Aunque sea media hora, estamos seguras de que este inesperado momento os alegrará el día (en todos los sentidos) a ambos.

A veces un simple gesto como pasar a recoger a tu pareja sin previo aviso después del trabajo, puede ser suficiente para alegrar el día y fortalecer la conexión emocional. Por no hablar de que estas visitas sorpresa pueden ser una oportunidad para experimentar nuevas ideas eróticas: desde un rápido encuentro en un lugar inesperado hasta un juego de roles improvisado, pueden ayudar a reavivar la pasión. La clave está en ser espontáneos y disfrutar del momento juntos.

Juguetes sexuales

(Foto: Oleg Elkov en iStock).

Puede que ya tengas y uses juguetes sexuales para placeres solitarios, pero recuerda que también puedes probarlos con tu pareja. En la actualidad hay numerosas webs especializadas que venden juguetes complementarios que os harán disfrutar tanto a uno como a otro, ¿no crees que merece la pena? Vibradores, anillos de placer, juegos sexuales para hacer juntos en la cama...

Los juguetes sexuales pueden ser una adición emocionante y enriquecedora a la vida íntima de cualquier pareja. Eso sí, es importante abordar la introducción de juguetes sexuales con una mente abierta y comunicarse sobre las expectativas y límites de cada uno. Probar juntos diferentes opciones puede ser una experiencia divertida y educativa, permitiéndoos explorar nuevas formas de placer y conexión.

Disfraces y personajes

(Foto: Larysa Vdovychenko en iStock).

No esperes a Halloween para disfrazarte de conejita, de bruja sexy o de una misteriosa agente secreta. Para una noche especial, no dudes en cambiar por completo de look y sorprender a tu pareja con un disfraz muy sensual: incorporar disfraces y personajes a vuestra vida íntima puede ser una forma divertida y emocionante de romper la rutina. Pueden añadir un elemento de sorpresa y novedad a vuestras interacciones.

Es importante recordar que el objetivo de los disfraces y personajes no es la perfección, sino el disfrute de ambos en la cama. No se trata de convertirse en actores profesionales, sino de dejarse llevar por la imaginación y el juego: la clave está en estar abiertos a experimentar y disfrutar del proceso juntos. Este juego de disfraces puede ser una oportunidad para llevar a cabo fantasías y deseos sexuales en un entorno seguro y consensuado entre ambos.

Nuevas tecnologías

(Foto: nito100 en iStock).

Ya que vivimos en una era de conexión y comunicación constante (vivan las redes sociales y los smartphones), aprovechad. Nada mejor que un mensaje picante antes de llegar a casa para empezar a excitaros mutuamente. O una videollamada caliente para ir preparando el asunto... Las posibilidades son infinitas y el sexting puede ayudar a despertar la imaginación y hacer que tengáis más ganas aún de veros.

Buscad nuevos sitios

(Foto: Constantinis en iStock).

Cama o sofá, ¿estas suelen ser vuestras dos opciones? No dudéis en buscar nuevos lugares para tener sexo, porque probar nuevos lugares para tener relaciones sexuales puede ser una forma emocionante de añadir chispa a vuestra vida íntima. Desde un polvo rápido en el coche hasta una aventura en el jardín, los lugares inusuales pueden añadir un elemento de sorpresa y novedad a vuestras interacciones.

Masajes y roces

(Foto: nd3000 en iStock).

Si soléis ir directamente al grano, los masajes serán sin duda alguna claves para reavivar la llama. Completamente desnudos, disfrutad de este momento de relax para calentar motores. Los masajes pueden ser una forma poderosa de reavivar la intimidad y la conexión emocional en la pareja. Y el simple hecho de dedicar tiempo a acariciar y explorar el cuerpo del otro puede ser una experiencia profundamente relajante y erótica. Los masajes no solo alivian el estrés, sino que también pueden despertar el deseo y la pasión.

Inspiración literaria

(Foto: South_agency en iStock).

Sí, leer solos o juntos libros eróticos puede ayudaros a reavivar la llama. Inspiraos y copiad ideas de obras literarias...Desde novelas clásicas hasta relatos contemporáneos, hay una amplia gama de libros eróticos que pueden satisfacer diferentes gustos y preferencias. Al compartir este tipo de lectura, podéis abrir conversaciones sobre deseos y fantasías, fortaleciendo así la intimidad y la conexión emocional.

Desconocidos

(Foto: Andrii Lysenko en iStock).

Nombre, profesión o incluso edad: sé quien quieras ser durante unas pocas horas. Convertíos en completos desconocidos (podéis incluso ir más allá fingiendo un encuentro) y descubrid de nuevo vuestros cuerpos. La excitación está garantizada porque jugar a ser desconocidos es una forma emocionante de añadir chispa a vuestra relación.

Música, por favor

(Foto: PeopleImages).

El silencio os puede paralizar (por vergüenza o por miedo a que os escuchen), por lo que no dudéis en probar a hacer el amor con una buena música de fondo. Estas son las mejores canciones para tener sexo. La música puede crear un ambiente de intimidad y deseo perfecto para hacer que vuelva a surgir la chispa. Desde baladas románticas hasta ritmos sensuales, puede ayudaros a despertar el deseo y la pasión, añadiendo un elemento de sorpresa y novedad a vuestras interacciones.

Romper tabúes

¿No te atreves con el sexo anal por miedo? ¿No soléis probar nuevas posiciones? No se trata de aprenderse de memoria el Kamasutra, sino de arriesgar (siempre y cuando tengáis ganas) y no dejaros llevar por preocupaciones o prejuicios. Olvidaros de lo que supone que deberíais hacer o de lo que te recomiendan tus amigas para intentar y probar. No hay nada vergonzoso o asqueroso mientras disfrutéis.

La lencería puede ser la clave

(Foto: South_agency en iStock).

Aunque las ganas van más allá de vuestros atuendos respectivos, es bueno sorprenderos con lencería o ropa interior inesperada y sexy. Hazte con un conjunto de encaje o de seda de un color poderoso (el negro y el rojo son las opciones ideales) y sorprende una noche a tu pareja. Si está acostumbrado a verte llevar algodón, triunfarás.

Desnudarse es un arte

Nada de quitarse rápidamente la ropa si lo hacéis habitualmente. Es el momento de reaprender el delicado arte de desnudarse y de miraros. Aunque creas que puedes precscindir de ello, esta etapa puede ser clave para excitaros y conseguir relaciones más placenteras. Tomaros el tiempo.

La importancia de besar

Besar hace saltar todas las alarmas, es el preámbulo, el acto que encenderá de forma inmediata el deseo. Probad un día con un nuevo juego: dime dónde te beso. Apuntad en papelitos diferentes zonas del cuerpo, dobladlos y coged uno al azar. O usad un dado... ¿Es necesario añadir algo más?

(Foto: fizkes en iStock).

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