En el universo de la perfumería, Italia se ha consolidado como uno de los grandes referentes de la tradición olfativa europea. De norte a sur, sus casas históricas han sabido preservar técnicas artesanas, materias primas nobles y fórmulas con alma. La isla de Capri, con su vegetación salvaje y su luz inconfundible, ha inspirado a algunos de los perfumes más personales del panorama italiano. En ese contexto, la firma Carthusia destaca como una de las más respetadas por las amantes de la perfumería que valoran autenticidad y carácter.
Fundada oficialmente en 1948, pero con raíces que se remontan a la Edad Media, Carthusia es símbolo de calidad, de mimo por el detalle y de producción limitada. Su catálogo, tan cuidado como su envoltorio artesanal, está repleto de composiciones que giran en torno a flores mediterráneas, hierbas locales y frutas jugosas. Notas como el clavel silvestre de Capri o el romero del Monte Solaro se han convertido en sus emblemas, creando perfumes florales nada típicos que merece la pena probar esta primavera.
Fiori di Capri de Carthusia, 77 años de historia
Pocas historias perfumísticas resultan tan seductoras como la leyenda del primer perfume de Capri. Se dice que en 1380, el prior del Monasterio de San Giacomo preparó un ramo de flores para la llegada de la reina Giovanna d’Angiò. Al no cambiar el agua durante varios días, notó que el líquido desprendía un aroma fascinante, que fue analizado por un monje alquimista: había nacido el germen de lo que siglos más tarde sería Fiori di Capri. En 1948, aquellas fórmulas fueron recuperadas por un químico de Turín con la bendición del Papa, dando lugar a Carthusia, una casa que sigue enamorando a beauty lovers en todo el mundo.
¿A qué huele Fiori di Capri?
Fiori di Capri, la primera fragancia creada por Carthusia, cumple 77 años convertida en un clásico de culto. Se trata de un perfume chipre floral con un desarrollo sorprendente. En la salida, combina bergamota, naranjo, mandarina, ciclamen, rosa turca y flores blancas como gardenia y tuberosa. Su corazón es intenso y especiado, con clavel, miel blanca, violeta, incienso, ciruela y fresa silvestre. Finalmente, el fondo es profundo y sensual: pachuli, ámbar, almizcle blanco, sándalo, cedro, ládano y musgo de roble.

Su creadora, la perfumista italiana Laura Bosetti Tonatto, ha logrado capturar la esencia caprese sin caer en lo obvio. Es la fragancia que solo las expertas en perfumería se atreven a llevar: tradicionalmente femenina, sí, pero también estructurada y rica en matices. Cada nota en Fiori di Capri cuenta una historia. Las flores evocan paseos por jardines antiguos tras la lluvia; las frutas, la vitalidad luminosa del sur; y el fondo amaderado aporta cuerpo y duración sin resultar abrumador. No es uno de esos perfumes frescos de verano que una editora de belleza tiene fichados por ser ligeros, sino uno de esos con personalidad, perfectos para noches cálidas. El precio es de 80 euros.
Otros perfumes italianos que merecen toda nuestra atención
Africa de Mazzolari

La propuesta de Mazzolari, con Africa, se mueve en otra dirección: más fresca, cítrica y directa. Desde la salida, con bergamota, cidra y cilantro, este perfume conquista a quienes buscan sensaciones limpias, nítidas y con un punto especiado. En el corazón, geranio y ciclamen aportan un matiz floral empolvado, mientras el fondo de ámbar y pachuli da ese punto sensual que lo hace ideal para los días de calor. El precio es de 148 euros.
Magnetic Mango de Bois 1920

En clave más frutal y exótica, Magnetic Mango de Bois 1920 es la propuesta perfecta para quienes buscan algo inesperado y alegre. Con notas de salida como flor de melocotón, cristales de sal y hojas de limón, sorprende desde el primer instante. Su corazón tropical, con mango, maracuyá, jazmín y nardo, lo convierte en un perfume suculento, floral y con mucha luz. El fondo, con sándalo, almizcle y cedro, aporta cremosidad y duración. El precio es de 125 euros.