Lo has escuchado mil veces y tienes una ligera idea de lo que significa “ejercicio anaeróbico”, sin embargo, para sacar todo el partido de tu entrenamiento debes saber exactamente en qué consiste y qué beneficios tiene. Los ejercicios anaeróbicos son actividades de alta intensidad que se realizan durante un corto período de tiempo, es decir, implican esfuerzos breves y de gran intensidad.
Este tipo de ejercicio es perfecto para trabajar la fuerza, la potencia y desarrollar la masa muscular. El término "anaeróbico" significa "sin oxígeno", y hace referencia al hecho de que en estos ejercicios, la energía que se utiliza proviene de fuentes acumuladas en los músculos, como la glucosa, en lugar de ácidos grasos, que requieren oxígeno para ser metabolizados. Por esta razón, para lograr una pérdida de peso efectiva, es necesario combinar tanto ejercicios aeróbicos como anaeróbicos, ya que los aeróbicos ayudan a quemar calorías, mientras que los anaeróbicos favorecen el desarrollo de la masa muscular, lo que, a largo plazo, acelera el metabolismo.
Algunos ejemplos de ejercicios anaeróbicos incluyen levantamientos de pesas, abdominales, saltos, entrenamientos de series cortas de carrera a gran velocidad, sprints, entre otros. Aunque estos ejercicios pueden parecer exigentes, tienen un gran impacto en la mejora de la fuerza y la tonificación muscular. Además, al realizarse en intervalos breves y de alta intensidad, permiten que el cuerpo continúe quemando calorías incluso después de que se haya finalizado el ejercicio, lo que se conoce como el efecto EPOC (consumo excesivo de oxígeno post-ejercicio).
Si bien los ejercicios anaeróbicos pueden ser un desafío al principio, son fundamentales para construir una base sólida de fuerza que te permitirá mejorar tu rendimiento en otras actividades físicas y ayudarte a alcanzar tus metas de salud y acondicionamiento físico. ¿Quieres conocer más detalles sobre los beneficios de este tipo de ejercicio? No te pierdas nuestra galería “5 beneficios de los ejercicios anaeróbicos”.
