Ni la cuarentena ha impedido que Ana de Armas y Ben Affleck presuman de amor paseando por las calles de Los Ángeles. Ya se ha convertido en costumbre ver a ambos disfrutando de su noviazgo públicamente, dejando ver que a la pareja le van las cosas viento en popa.
De hecho, cada vez podemos ver más muestras de complicidad y de feeling entre ellos. En la última ocasión, los dos han disfrutado del buen tiempo y han aprovechado para salir de paseo por Pasadena, California, junto a su perro ‘Elvis’, de una raza similar al bichón maltes.

Para ir cómoda pero estilosa, Ana de Armas se ha enfundado en unos vaqueros azul medio pitillos, combinados con una camiseta negra y una sudadera de cremallera aterciopelada oversize en tono granate y con print floral. Sin duda, un ‘street style’ que no ha dejado indiferente a nadie. Por su parte, Ben Affleck ha seguido fiel a su estilo y ha combinado un vaquero con una camiseta azul royal y una chaqueta grisácea con solapas. El actor ha puesto el broche de oro al look con una gorra que daba al resultado final un toque más ‘ sporty’.
Ambos han reído durante el paseo y no se han escondido a la hora de dedicase gestos cariñosos. En una ocasión, Ana se ha subido a una acera, y aprovechando que estaba a la misma altura que Affleck, le ha agarrado la cara, quedándose ambos rostros a escasos milímetros el uno del otro.

A pesar de las circunstancias, en las que se recomienda a los ciudadanos quedarse confinados en casa, la pareja se ha mantenido inseparable. No es la primera vez que vemos que los actores de ‘Deep Water’ salen a la calle junto a su perro. Según ‘Us Weekly’, la actriz cubana se habría “mudado temporalmente” a casa del actor mientras dure la cuarentena: “Ana está muy feliz con Ben. A ella le encanta pasar tiempo con él y ellos tienen una fantástica química y se divierten mucho juntos”, desvelaba el tabloide.
No cabe duda de que esta relación va muy en serio. Desde que la pareja de actores coincidiera en el rodaje de ‘Deep Water’, los rumores se avivaron sobre una posible relación. Estas informaciones se hicieron ciertas después de que Ana decidiera dar un paso más allá y llevar a su compañero a Cuba , su tierra natal, donde podrían haber surgido las presentaciones familiares.