Como psicóloga clínica con una amplia experiencia en ayudar a las personas a enfrentar sus emociones y superar situaciones desafiantes, la doctora Jennifer L. Taitz, especialista en terapia cognitivo-conductual, ha identificado un problema recurrente entre sus pacientes: el pensar demasiado. Este hábito, señala, puede convertir incluso los problemas más simples en fuentes abrumadoras de ansiedad.

Según la Dra. Taitz, una de las claves para abordar este problema radica en el reconocimiento de los patrones de pensamiento excesivo. "El primer y más importante paso es el reconocimiento de patrones", destaca. ¿A qué horas del día te encuentras inmerso en tus preocupaciones? ¿Qué señales físicas indican que estás pensando demasiado? ¿Hay temas recurrentes que ocupan tu mente? Reflexionar sobre estos aspectos puede proporcionar una base para desarrollar estrategias efectivas.
Una de las técnicas recomendadas por la Dra. Taitz es el "autodistanciamiento", que implica observar las dificultades desde una perspectiva externa. "La próxima vez que te encuentres sumergido en una rumiación infructuosa, trata de ver el panorama general", sugiere. Este enfoque puede ayudar a proporcionar la distancia necesaria para cambiar de perspectiva.
Otro cambio de mentalidad sugerido por la Dra. Taitz es reemplazar las preguntas de "por qué" con preguntas de "cómo". En lugar de preguntarse "¿por qué a mí?", sugiere preguntarse "¿cómo puedo seguir adelante?". Este cambio, explica, puede conducir a la acción y empoderamiento en lugar de quedar atrapado en un callejón sin salida de pensamientos negativos.
La escritura expresiva también puede ser una herramienta efectiva para procesar emociones y experiencias difíciles, según la Dra. Taitz. Recomienda un ejercicio de tres días que involucre escribir sobre el estrés y el trauma, cómo ha afectado la experiencia y cómo se relaciona con la vida actual y los objetivos futuros.
Por último, la Dra. Taitz sugiere reprogramar conscientemente el pensamiento excesivo asignando un tiempo específico para reflexionar sobre un problema, y luego dejarlo ir. "Date 10 minutos para reflexionar sobre un problema a las 7:00 p.m. todas las noches, luego sigue adelante", aconseja. Este enfoque puede ayudar a evitar que el pensamiento excesivo consuma el día, permitiendo así recuperar el control y la libertad.
La Dra. Taitz ofrece una serie de estrategias prácticas para combatir el pensamiento excesivo y recuperar el control sobre las emociones y la vida cotidiana. Estas técnicas, respaldadas por su experiencia clínica y conocimientos en terapia cognitivo-conductual, pueden proporcionar un camino hacia una mente más tranquila y equilibrada. (Fuente: Jennifer L. Taitz, Psy.D, ABPP, autor de "Restablecimientos de estrés: cómo calmar tu cuerpo y mente en minutos").