Con el buen tiempo a la vuelta de la esquina, se empiezan a notar las ganas por salir o preparar ese viaje que llevas atrasando con tus amigos. Todo ello provoca que, durante estos meses de verano, quieras ser cada vez más original a la hora de hacer planes.
Si cada vez que dices no a un plan sientes agobio, es muy probable que tengas FOMO. Esta patología es conocida mundialmente como "Fear Of Missing Out", traducido como temor a dejar pasar o temor a perderse algo, suele llegar en temporada donde todo el ambiente se pone a favor para querer salir de casa.
Este sentimiento de culpa por no hacer nada divertido o emocionante mientras la gente a tu alrededor sí lo hace, se vio alimentado por el auge de las redes sociales. Las publicaciones de terrazas, conciertos al aire libre y viajes de ensueño nos hacen sentir que nos estamos perdiendo algo. Así, las redes sociales son también un desencadenante de la culpa por el sol. Ver a todos tus amigos y familiares disfrutando del sol desde el sofá te hace sentir aún más que estás haciendo algo mal.
¿Qué es el sentimiento de culpa por el sol?
La llamada "sun guilt" puede traducirse literalmente como "sentimiento de culpa en los días soleados". En momentos en los que las temperaturas son altas, se da por sentado que uno sale inmediatamente a tomar el sol, hacer un picnic o ir de excursión. En realidad, cualquier actividad es buena siempre que no se esté dentro. Estar en casa porque estás trabajando o viendo tu serie favorita, por ejemplo, puede hacer que sientas culpabilidad.
No sólo las redes sociales pueden desencadenar este sentimiento, también hay otros factores. Por ejemplo, esta sensación es más común entre los residentes de países donde el clima suele ser frío y húmedo, como Bélgica. Los días cálidos escasean y si el sol aparece una vez mientras estás sentado en casa, es bastante normal experimentar la sensación de que estás desperdiciando ese día.
¿Qué hacer al respecto?
Si quieres hacer frente al sentimiento, debemos buscar la causa. Si se da el caso de que tienes cosas que hacer, como trabajar en tu oficina, pero en realidad preferirías disfrutar del sol, una idea es trasladar tu oficina al exterior. De esta forma, además de trabajar, tomarás una buena ración de vitamina D.

Pero lo más importante es darse cuenta de que cada uno tiene su propia forma de relajarse y que habrá muchos días soleados por delante. Por lo tanto, es una buena idea tomarse un descanso de las redes sociales para no tener que enfrentarte cada día a lo que "podrías estar haciendo".
Este artículo se publicó originalmente en Marie Claire Bélgica.
Traducción y adaptación: María Alamillo Díaz.