No tenemos muy claro el motivo, pero una de nuestras aficiones en verano es ver películas clásicas que transcurren en zonas tan cool como la Costa Azul de Francia. 'Atrapa a un ladrón' (1955) o 'La Piscina' (1969) sin algunos de los films que, cada mes de julio o agosto, recuperamos en mínimo una ocasión.
Grace Kelly al volante junto a Cary Grant o a Jane Birkin tomando el sol cerca de la piscina son escenas míticas de la historia del séptimo arte y hay algo muy placentero en ellas. Más allá de estas imágenes, ver fotografías antiguas de mujeres en la playa con su silla, su sombrilla y su lookazo de verano es realmente hechizante. Sin lugar a dudas, son instantáneas tan especiales que nos hacen desear tener entre manos una silla de playa de aire retro.
Lejos de los clásicos modelos de plástico que vemos ahora en muchas costas, Zara Home ha lanzado esta temporada una silla por la que suspiramos en la redacción de Marie Claire. La silla en concreto es plegable y cuenta con estructura metálica y asiento reclinable en cuatro posiciones diferentes, reposabrazos de madera de fresno y lona en color verde botella intenso. Además, tiene un asa en la parte posterior para facilitar su transporte y es muy fácil de plegar.
Las medidas de esta silla son 57 x 60 x 60 (alto, ancho y fondo), así que es un modelo que ofrece comodidad y espacio para colarnos a leer o a contemplar el mar en calma. Otro detalle importante es el peso, que son 4,36 kg, así que se trata de una silla bastante ligera que no resulta complicada de transportar del hotel a la playa. Zara Home destaca que la mejor opción para lavarla es hacerlo con un paño secando, dejando a un lado productos como la lejía. El precio es de 89,99 euros, pero la inversión merece la pena.
Nosotras lo tenemos claro: nos imaginamos sentadas leyendo la edición de papel de Marie Claire con un bikini de tiro alto y una sombrilla de rayas protegiéndonos del sol. Seguramente, este será el momento más feliz de todo el verano (y también el más sosegado).
