La actriz Jennifer Aniston es un icono mundial en todos los sentidos de la palabra. Desde que encarnase a la popular Rachel en Friends, no hay persona en la tierra que no haya visto, al menos, una vez en la vida, el rostro de la californiana (de acuerdo, es una exageración, pero recordemos que la serie de Marta Kauffman y David Crane ha sido emitida en Netflix y HBO Max, con todo lo que esto representa).
Más allá de su carrera profesional y de su íntimo vínculo con la moda y la belleza (tiene su propia firma de productos de cuidado capilar, LolaVie), su vida sentimental siempre ha ocupado numerosos titulares. Sobre todo, durante su romance con Brad Pitt y su sonada separación allá por 2005.
El divorcio de Aniston y Pitt ha sido, sin lugar a dudas, uno de los temas de conversación más repetitivos de la historia. Por supuesto, que Angelina Jolie formara parte de la narrativa lo hacía todo más suculento para la prensa y los debates públicos, pero hoy no venimos a hablar sobre los detalles de la vida privada de la actriz, hoy toca analizar sus últimas palabras para lanzar un mensaje feminista y de esperanza.
Jennifer Aniston acaba de ofrecer una entrevista a The Wallstreet Journal en la que recuerda su época en Friends, explica todos los detalles sobre un tratamiento facial con esperma de salmón al que se ha sometido y también cede un espacio al análisis de sus divorcios con el paso del tiempo.
En palabras de la californiana, la separación oficial de Bitt supuso "un verdadero cambio en mi vida en términos de resurgir de los escombros". En aquel momento, encontró en el trabajo "un auténtico lugar de consuelo".
"Hubo un momento en mi mundo, y en mi carrera, en el que me di cuenta de que defender lo que te mereces y lo que quieres no es ser agresiva, combativa, malhumorada o sensible. Es un músculo difícil de desarrollar. Y también de ser querida y respetada. Es algo difícil de conseguir", una carta de amor a la autoestima, el cuidado de una misma y el hecho de escucharnos para saber que es lo que realmente deseamos. Algo que, tristemente, no siempre hemos hecho las mujeres a causa del oprimente sistema que se diluye con el tiempo, pero sigue latiendo.
Recordemos que Aniston volvió a divorciarse en 2018. "Se me dan muy bien el resto de mis trabajos, y de alguna manera esa es la única área que está un poco de aquella manera…", señala la actriz en el medio estadounidense. Entre risas, comenta emite un mensaje de amor a su perro. "Mi perro. Con él es con quien me acuesto".
Uno de los datos que Jennifer ha ofrecido en esta entrevista y que nos ha sorprendido es conocer detalles de la infancia de la actriz que pueden tener una fuerte influencia en el presente. "Mis padres… al ver la relación de mi familia, aquello no me hizo pensar 'oh, qué ganas tengo de hacer eso'. No me gustaba la idea de sacrificar quién era o mis necesidades, así que lo cierto es que no tenía ni idea de cómo hacerlo. De alguna manera, se me hizo más fácil estar sola. No se me procuró una auténtica formación en ese tipo de toma y daca".
Palabras como las que Aniston ha manifestado en The Wallstreet Journal son tan necesarias para todas las mujeres que nunca está de más hacer hincapié en que las relaciones amorosas tan solo deberían existir para que nuestra vida sea más feliz, no para "sacrificar" quien somos ni para dejar a un lado nuestras "necesidades", tampoco para estar "completas" (no somos medias naranjas ni medios limones). Jennifer, al igual que muchas otras, no necesita a una pareja para ser feliz y hacerlo público en un universo tan marcado -todavía- por la tradición es digno de admirar.
