¿Llevas bastante tiempo notando que tu relación ya no es la misma que la del principio? ¿Discutes más que nunca con tu pareja? ¿Estáis siempre enfadados o molestos con el otro? ¿Sientes que en cualquier momento podriáis romper? Cada pareja es un mundo y en el amor no hay reglas fijas que funcionen, pero lo cierto es que después de mucho tiempo, los expertos en el tema han identificado las principales causas que causan discusiones, problemas y finalmente, rupturas en las relaciones amorosas. ¡Y también cómo evitarlos! No te decimos que identificando las causas de una discusión salves tu relación si está en un punto de no retorno… pero quizás saber qué temas pueden generar conflictos te pueda ayudar en más de una ocasión.
Hay mil y un asuntos que pueden generar discusiones en una pareja, pero los más típicos y comunes se reducen a diez: los temas de orígenes familiares, el cómo se gestiona el tiempo libre de cada miembro de la pareja, el dinero, el cuidado de los hijos y cómo se reparten las tareas domésticas suelen ser los más recurrentes.
Una vez tengas identificados los temas que más problemas generan en tu relación, podrás buscar la causa que los provoca e intentar solucionar el problema sin tener que discutir o sin una pelea de por medio. ¡Y será mejor para todos! Las relaciones de pareja exigen un grado de compromiso y una fuerza de voluntad muy altos, (que convierten la experiencia en un reto), por lo que es normal que en algún momento aparezca algún conflicto. Eso sí, te vendrá bien saber si las pequeñas discusiones son ‘normales’ o ‘comunes’ y si se parecen a las que tienen el resto de relaciones o si realmente hay algún problema más específico y serio por el que tengas que tomar medidas más concretas, como acudir a terapia de pareja o en el peor de lo casos, romper con tu pareja. Estos son los 10 motivos más comunes por los que suelen discutir (y romper) las parejas, ¿qué piensas tú? Alguna vez has discutido con alguien por estas razones?
Las familias
El tema de la familia de cada miembro de la pareja es un motivo frecuente de discusión, sobretodo en parejas que acaban de empezar. Cómo influyen en la relación, cada cuánto tiempo se les visita, sus opiniones... La calma, la empatía y la paciencia son las mejores armas en estos casos.

Los hijos
Las discusiones con respecto a los hijos son inevitables. Intenta verlas como algo necesario, como un tipo de negociación que servirá para acordar temas fundamentales como la educación, los permisos y los límites que tienen. Importante, eso sí: no utilices a tus hijos como 'argumento' para ganar una discusión.

El dinero
¿Qué es mejor, mantener cuentas separadas o hacer un fondo común? Depende de cada persona. No hay un modelo mejor que el otro, lo recomendable es crear unas reglas iniciales sobre cómo queremos llevar la parte económica de la relación.

El tiempo libre
Cómo se gestiona el tiempo libre de cada persona es uno de los grandes desencadenantes de discusiones en parejas. Es importante que recuerdes que en una pareja tiene que existir el espacio y la independencia para uno mismo: si todo es compartido, uno de los dos (o ambos miembros) se estará anulando.

Los celos
Los celos puede significar interés hacia el otro, pero no dejan de ser tóxicos y se debe tener mucho cuidado con ellos. Desde el principio de la relación se tienen que establecer límites e intentar no dar pie a intentos de control social.

Las tareas del hogar
Otra de las grandes causas de discusiones en las relaciones es el reparto de las tareas domésticas: limpiar, cocinar... Es normal que cada persona tenga su propia concepción de lo que significa vivir en un hogar ordenado y limpio. La solución pasa por negociar las tareas y que ambos realicéis compromisos, equilibrando los tiempos dedicados.

El orgullo
¿Cuántas veces has discutido por orgullo, o por qué querías llevar la razón? ¿Cuándo conviene ponerse firme y cuándo “no vale la pena discutir”? Es importante hablar, pero en una discusión, deberías preguntarte si realmente quieres resolver el problema, simplemente ganar al otro o no 'perder' tu orgullo.

Los intentos de cambio
¿Por qué intentar cambiar a tu pareja? Los expertos suelen decir que la gente se separa por lo mismo que se enamora: las diferencias y las cosas opuestas del otro, que nos complementan. Desde el principio de una relación se debe tener claro cómo es la otra persona y no esperar un cambio, ni mucho menos idealizarlo.

El trabajo
En muchas parejas, más allá de quien gane más en su trabajo, las discusiones suelen surgir en torno a quien tenga una posición más 'importante' en su carrera profesional y quién dedica más tiempo a su vida laboral que a la personal. Habla con tu pareja si sientes que no te dedica suficiente tiempo y establecer vuestras prioridades en común.

La rutina
La rutina en el día a día puede minar el ánimo de ambos miembros de la pareja. También apagar la chispa de la pasión y hacer que no queráis pasar tiempo juntos, o que discutáis con más frecuencia. Lo más recomendable es buscar nuevas experiencias para reavivar el amor. Aquí tienes muchas ideas.
