El reciente episodio de MasterChef ha desatado una ola de controversia, centrada en el enfado y la actitud de Jordi Cruz al anunciar la salida de una concursante, Tamara, del programa. Este suceso ha generado opiniones divididas, mayormente a favor del derecho de Tamara a priorizar su salud mental.

Tristán Ulloa, reconocido actor, expresó su descontento hacia Jordi Cruz con un contundente mensaje en las redes sociales: "Se creen con derecho de humillar y comprar la dignidad de los concursantes que muchas veces participan por necesidad". Sus palabras reflejan el malestar de quienes ven en la actitud del jurado una falta de empatía hacia los participantes del programa.

La ministra de sanidad, Mónica García, también se sumó al apoyo a Tamara, resaltando la importancia de priorizar el bienestar emocional sobre las exigencias de una vida acelerada; "priorizar el bienestar emocional sobre los ritmos de vida frenéticos no es egoísmo, sino una decisión valiente".
Desde el inicio de la temporada, Tamara destacó por su personalidad fuerte y sus roces con el jurado, especialmente con Jordi Cruz.
Sin embargo, su decisión de abandonar el concurso sorprendió a muchos, marcando un hito en la historia del programa. Su partida era previsible para algunos, dada la falta de conexión con el formato y los objetivos del programa.

Aunque Tamara intentó suavizar su actitud en el último episodio, finalmente optó por partir, argumentando que su bienestar emocional estaba por encima de la competición.
Esta postura provocó reacciones encontradas, especialmente por parte de Jordi Cruz, cuyas palabras hacia la concursante generaron un debate sobre la empatía y el respeto en el ámbito televisivo.
La reacción airada de Jordi Cruz, expresada con dureza ante las cámaras, ha puesto al programa y al propio chef en el centro de la crítica pública. Muchos seguidores han expresado su apoyo a Tamara a través de las redes sociales, defendiendo su derecho a cuidar su salud mental y cuestionando la actitud del jurado.

El abandono de Tamara ha puesto de relieve la importancia de considerar la salud mental en entornos competitivos como MasterChef. Si bien el programa ha abordado este tema en ocasiones anteriores, la salida de Tamara plantea la necesidad de revisar los criterios de selección de los concursantes y promover un ambiente más respetuoso y comprensivo en el mundo de la televisión.