Angela Dobrowolski, exesposa del productor Josep María Mainat, ha sido condenada a cuatro años y medio de prisión por un delito agravado de lesiones. La condena se relaciona con un incidente ocurrido en junio de 2020, cuando Dobrowolski inyectó insulina a Mainat mientras él dormía, con la intención de acabar con su vida.
Aunque tanto la Fiscalía como la acusación particular, representada por Olga Tubau, abogaban por una pena de 13 años de prisión para la alemana, la Audiencia de Barcelona ha dictado una sentencia considerablemente más baja. El tribunal ha considerado que, a pesar del intento de asesinato, Dobrowolski mostró arrepentimiento al contactar a Emergencias para solicitar asistencia médica para su exmarido. Además de la condena, se ha impuesto una orden de alejamiento de 1.000 metros de Mainat durante 8 años y medio. La historia da para hacer un true crime.
El tribunal ha confirmado que se probó que Dobrowolski se inyectó insulina con la intención de causar la muerte de Mainat. Sin embargo, el hecho de que llamara al Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) a tiempo ha sido considerado como un signo de "arrepentimiento espontáneo". Por ello, la Audiencia ha excluido la pena de asesinato, reduciendo la condena a un delito de lesiones. En el momento de la sentencia, Mainat estaba presente para escuchar el fallo, mientras que Dobrowolski se encuentra actualmente en prisión provisional en el centro penitenciario de Brians 1 por otro delito relacionado.
Reacción de Josep María Mainat
El productor Josep María Mainat ha comentado la sentencia ante los medios, diciendo: "No estoy seguro de si la sentencia es justa, pero creo que es correcta. La ley se ha interpretado tal como está escrita". Mainat ha expresado su descontento con el tiempo que ha tomado llegar a una resolución, señalando que han pasado cuatro años desde el incidente. No obstante, ha manifestado su satisfacción de que "finalmente se haya hecho justicia".
"Que condenen a tu esposa ya la madre de tus hijos por intentar asesinarte no es motivo de alegría", ha añadido Mainat. "Es una sentencia intermedia, pero al menos se ha hecho justicia." El productor ha indicado que se encuentra en una posición de ambivalencia emocional, afirmando: "No estoy ni feliz ni triste. El intento de asesinato existió, y la justicia ha hablado".
