La princesa Leonor podría haber heredado los rasgos de Victoria Luisa de Prusia, la única hija del último emperador alemán, el káiser Guillermo II. Se trata de la tatarabuela de la primogénita de los Reyes de España, y parece que físicamente se parece a ella. No es la única royal que ha heredado la genética de un antepasado, hay otros ejemplos como el de Alexandra de Hannover o Beatriz de York.
Princesa Leonor y Victoria Luisa de Prusia
La tatarabuela de Leonor era la hija del último Kaiser de Alemania, duquesa de Brunswick y Luneburg por matrimonio y princesa de Prusia, nació en 1892 en el palacio de Mármol de Postdam, muy cerca de Berlín. A pesar de los miembros que recorren el árbol genealógico entre Leonor y Victoria, el parecido físico entre ellas es asombroso. La princesa de Prusia era bajita, rubia, de ojos azules y hacía gala de una fuerte personalidad y una gran inteligencia. Una joven aventurera a la que no se le ponía nada por delante, que amaba hacer actividades al aire libre y disfrutar de la naturaleza.
Princesa Charlotte y Lady Sarah Chatto
La hija mayor de los duques de Cambridge también ha heredado el aspecto físico de un antepasado. La pequeña Charlotte ha absorbido los genes de Lady Sarah, la hija de la princesa Margarita. Lo cierto es que sus fotos de cuando era pequeña, podrían confundirse con las de la hija de Kate y Guillermo.
Princesa Beatriz y Reina Victoria
Beatriz de York guarda un gran parecido físico con la reina Victoria de Inglaterra, soberana del imperio británico y tatarabuela de la reina Isabel II. La cara redondeada y la forma de los ojos y las cejas recuerda mucho a este antepasado de la princesa Beatriz, de la que parece que ha heredado los rasgos físicos.
Princesa Eugenia e Isabel Bowes Lyon
La princesa Eugenia debe su físico a su bisabuela, la reina Elizabeth, la madre de la reina Isabel II. Fue la mujer del rey Jorge VI y al comienzo de su reinado pasó a ser llamada Reina Madre, que es como se le ha conocido siempre. La hija pequeña del príncipe Andrés tiene la misma nariz y boca que su bisabuela.
Infanta Sofía e Irene de Grecia
Su hermana pequeña tiene un parecido mucho más cercano. La infanta se parece mucho a su tía abuela, Irene de Grecia, la inseparable hermana de doña Sofía. Los genes borbónicos tienen mucho peso en las nuevas generaciones. Soltera y sin hijos, Irene de Grecia está cada vez más unida a su hermana Sofía, con la que está pasando largas temporadas.
Froilán y Fernando VII
El hijo de la infanta Elena tiene un parecido físico con Fernando VII, hijo de Carlos IV, que se parece a su vez a Juan Carlos I. Un cruce de genes que no deja fuera a ningún miembro de la realeza española.
Príncipe Harry y Duque de Edimburgo
El miembro más polémico de la Familia Real inglesa es una réplica de su abuelo cuando era joven. El duque de Sussex guarda gran similitud con el fallecido marido de la reina Isabel II.
Alexandra de Hannover y Federica de Grecia
Carolina de Mónaco ha comentado en alguna ocasión que su hija pequeña le recuerda a su tía Federica, reina de Grecia, y madre de la reina Sofía. Alexandra de Hannover parece ser un calco de su tía abuela, a la que se parece por dentro y por fuera. Parece que la personalidad de ambas es muy similar, dos mujeres muy alegres y familiares que además también se parecen físicamente.
Juan Carlos I y Carlos IV
La genética de los Borbones no perdona. Carlos IV de España, más conocido como ‘el Cazador’, ha vuelto a nacer en el rostro de Juan Carlos I, que guarda un parecido innegable con este antepasado.
