Triatlón, amor por España y un fuerte deseo: así es la vida de Alexia de Grecia, la prima de Felipe VI

Nacer en el seno de una familia real no es una elección y Alexia de Grecia y Dinamarca lo sabe muy bien. Por un lado tenemos a miembros de la realeza como Ignacio de Borbón, que ha aprovechado su apellido para volar a Honduras y participar en ‘Supervivientes’, y por otro lado tenemos el caso de Alexia, sobrina de la reina Sofía y, por tanto, prima de Felipe VI, cuyo sueño es vivir en el anonimato para siempre y alejarse del foco mediático a pesar de ser quien es. Hoy celebra su 57 cumpleaños y es más que probable que sople las velas pidiendo el mismo deseo: ser anónima. El año 2003 marcó un antes y un después en su vida, fue entonces cuando la primera del rey de España decidió perseguir el ansiado anonimato de manera incansable. La royal se mudó a Lanzarote, tierra natal de su novio, en un intento desesperado de no ser reconocida en ninguna parte y poder llevar una vida lo más normal posible a pesar de su apellido.

El 10 de julio de 1965 llegaba al mundo Alexia de Grecia y Dinamarca en el palacio de Mon Repos, la residencia de descanso de la familia griega ubicada en la isla de Corfú. Alexia es la primogénita de la reina Ana María de Dinamarca y el rey Constantino de Grecia, y fue heredera al trono hasta el nacimiento de su hermano Pablo. Cuando la royal celebró su segundo cumpleaños, su padre decidió exiliarse y a finales de 1967 se fueron a Roma, donde nació su tercer hermano Nicolás. Posteriormente vivieron en Dinamarca y Londres, donde nacieron Teodora y Felipe. En 1983 el rey Constantino volvió a Grecia, coincidiendo con el funeral de la reina Federica.

Alexia comenzó su etapa escolar en casa de la mano de un profesor griego contratado por sus padres. La royal decidió estudiar Historia y se especializó en Pedagogía con un posgrado. Poco después, conoció a uno de sus primeros amores, Barcelona, y en 1992 decidió mudarse a la ciudad condal y estudiar Educación Infantil. Alexia trabajó en la Asociación Síndrome de Down con los niños. En Barcelona estrechó su relación con la infanta Cristina, ya que ambas vivían allí, y a día de hoy sigue existiendo buena sintonía entre ellas. Alexia ha viajado a Washington y a Suiza para acompañar a su amiga en una de las etapas más duras de su vida.

Alexia no solo se enamoró de Barcelona. En 1994 conoció a Carlos Morales y la pareja se dio el ‘sí, quiero’ en julio del año 1999 en la catedral ortodoxa de Santa Sofía en Londres. La sobrina de la reina Sofía lució un vestido de Inge Sprawson y llegó al lugar en un Rolls Royce ante la atenta mirada de los invitados VIP la ceremonia. Carlos y Alexia han tenido cuatro hijos: Arietta, Ana María, Carlos y Amelia. La idea de ser padres fue de la mano con la decisión de mudarse a Lanzarote en busca de paz y tranquilidad.

La familia al completo vive ahora en una impresionante residencia ubicada en Puerto Calero, en el municipio de Yaiza. Fue el propio Carlos quien diseñó el nuevo hogar familiar, que dispone de un extenso jardín donde los pequeños jugaban a sus anchas y una piscina con vistas al mar. Los seis son grandes amantes del deporte, pero Alexia tiene debilidad por el atletismo y ha participado varias veces en triatlones.

La princesa participó en ‘El Lava Arrecife-Lanzarote’, una de las competiciones de triatlón más conocidas de la isla en la que reside la familia. La carrera consistía en 1,9 kilómetros a nado, 90 km en bici y 12 km corriendo, un triatlón muy duro que Alexia consiguió completar sin mayor dificultad aunque con mucho esfuerzo. Parece que la royal ha conseguido mantenerse en un discreto segundo plano y alejarse del foco mediático, su sueño desde principios de los 2000 cuando decidió mudarse a la isla junto a su pareja. Alexia se ha convertido en uno de los grandes apoyos de su prima, la infanta Cristina, que está atravesando unos días complicados tras su divorcio de Iñaki Urdangarin.