El rey Harald V de Noruega ha vuelto a ser ingresado este jueves en el hospital universitario Rikshospitalet de Oslo, debido a unos problemas de salud ocasionados por una fuerte fiebre. La Casa Real noruega ha sido la encargada de transmitir la noticia a través de un breve comunicado en el que afirman que el monarca se encuentra en “condición estable”. De esta forma, el que fuera en su día el gran amor de la reina Sofía suma un capítulo más a su largo historial de ingresos. A sus 85 años, Harald de Noruega ha tenido que acudir a las instalaciones de este centro hospitalario en repetidas ocasiones durante los últimos meses; por lo que su estado de salud preocupa y mucho a sus súbditos.

Desde la televisión noruega han informado de que en las últimas horas un convoy de dos coches ha visitado las instalaciones de este hospital universitario de Oslo. A pesar de que no han podido identificar a los ocupantes del mismo, afirman que dichos vehículos han salido escoltados por la policía; por lo que seguramente se tratara de algún miembro de la Familia Real noruega visitando al soberano. Aunque no han trascendido muchos más detalles acerca de las causas que han provocado este importante cuadro de fiebre en Harald, desde el Palacio Real de Oslo han querido mandar un mensaje tranquilizador afirmando que el monarca se encuentra fuera de peligro.

También se desconoce cuánto tiempo va a tener que estar ingresado en el hospital. Lo que si se sabe es que el rey Harald de Noruega se verá en la obligación de ausentarse unos días de sus deberes reales; y será su primogénito, el príncipe Haakon, el encargado de asumir las funciones de regente durante la ausencia por enfermedad del soberano noruego. No es la primera vez que el heredero al trono de Noruega ocupa el lugar de su padre cuando la salud de este último le ha impedido acudir a importantes citas para la Corona. Y es que, el estado de salud del rey Harald V ha ido empeorando durante los últimos meses, obligándole a tener que visitar las instalaciones del Rikshospitalet en repetidas ocasiones; por lo que cada bache que sufre el monarca noruego hace que todo el país permanezca muy atento a cuál es su evolución. Hace tiempo que la posibilidad de que Harald abdique se ha vuelto uno de los temas mas recurrentes en el país nórdico, donde consideran que el príncipe Haakon ya está sobradamente preparado para asumir el trono.

Sin embargo, parece bastante improbable que el rey Harald vaya a tomar la decisión de abdicar en favor de su hijo en un corto plazo de tiempo; ya que el monarca está muy comprometido con su labor al frente de Noruega. Hijo de los reyes Olaf y Marta de Suecia, Harald V accedió al trono en el año 1991; y desde finales del pasado año ha tenido que ser ingresado en el hospital de Oslo en diferentes ocasiones debido a varios problemas de salud. El pasado 9 de octubre fue ingresado en el citado centro médico para someterse a una operación de corazón con el objetivo de poder respirar mejor. A pesar de que la intervención fue todo un éxito, el monarca noruego tardó casi un mes en retomar su agenda oficial.

Poco después, a mediados del pasado mes de diciembre, tuvo que ingresar de nuevo varios días en el Rikshospitalet debido a una infección vírica; y en marzo volvió a visitar sus instalaciones al contraer el coronavirus. La ultima vez que Harald de Noruega acudió a un acto oficial en representación de la Corona fue el pasado 22 de junio, con motivo de la celebración del 18 cumpleaños de la princesa Ingrid Alexandra en el Palacio Real de Oslo; un aniversario que también contó con la presencia del rey Felipe VI, quien mantiene una excelente relación con el heredero noruego desde hace muchos años.

Aunque si hablamos de relaciones, no podemos olvidar la que casi une al heredero noruego con una joven Sofía de Grecia hace más de medio siglo. A los 15 años el príncipe Harald de Noruega y Sonia Haraldsen se enamoraron tras coincidir en un campamento de verano. Por aquel entonces, el rey Olaf V no vio con buenos ojos que su primogénito se casara con la hija de un comerciante que pertenecía a la burguesía noruega y mandó a su hijo a estudiar a Oxford con el fin de que se olvidara de Sonia y encontrara una prometida más acorde a su estatus. “Yo sé que hubo muchos intereses de casarnos. Se provocaron encuentros, se hicieron cábalas…”, confesó la reina Sofía hace unos años.

A pesar de la insistencia de su padre, el príncipe Harald tenía muy claro que su amor estaba reservado para Sonia Haraldsen, e incluso amenazó con renunciar a sus derechos dinásticos si no le permitían casarse con ella. Finalmente, Harald y Sonia se casarían el 29 de agosto de 1968 en la famosa Catedral de Oslo, seis años después de que Sofía de Grecia y Juan Carlos I se dieran el “sí, quiero” en Atenas.