Del aloe vera y la vitamina C en el pasado, a los actuales y omnipresentes retinol, ácido hialurónico o colágeno, hay cientos de activos menos (o nada) conocidos, que son igualmente funcionales y eficaces. ¿Por qué unos se ponen de moda y otros no?.
Esos protagonistas en la formulación cosmética "son ingredientes que funcionan y aportan resultados desde su primera aplicación", responde Pedro Catalá, cosmetólogo, doctor en Farmacia y fundador de Twelve Beauty, firma española con fans incondicionales como Emma Watson o Elle Macpherson. "
"Al final a formuladores y consumidores les gusta moverse en esa zona de confort de lo conocido. Son ingredientes tradicionales de los que sabemos casi todo".
Valores añadidos
Sin embargo, entre esos indispensables de repente se cuelan nombres de otros ingredientes que nos suenan mucho menos, artificiales o naturales. No todos son estrictamente nuevos. De hecho, hay algunos que llevan miles de hay algunos que llevan miles de años incorporándose a los cosméticos, aunque pasen desapercibidos.
Entre los de origen natural, muchos tienen una procedencia exótica, lo que resulta muy atractivo para el consumidor. Se trata de un "valor añadido" al producto, sostiene el cosmetólogo.
"No es lo mismo decir que una crema es rica en aceite de girasol que decir que es una crema rica en aceite de melón del desierto del Kalahari, a pesar de ser dos aceites idénticos desde el punto de vista químico". Y, no nos engañemos, el marketing también juega un papel fundamental, admite el experto.

Entre esos activos revelación, ¿qué preferimos los usuarios? ¿Los ingredientes naturales, los creados en laboratorios o una combinación de ambos?
"Por regla general, sobre el papel, al consumidor le atraen mucho más los ingredientes naturales, pero a la hora de la compra la balanza se inclina más por tendencias del momento y/o marcas de culto. También hay una gran parte de usuarios que dan prioridad a la efectividad y a los resultados visibles, sean solo naturales, sintéticos o una combinación de ambos", concluye Catalá.
La caléndula y otros ingredientes cosméticos en tendencia
Estos son los "nuevos" activos cosméticos naturales y/o artificiales, de la A a la Z (para que ya no pongas cara de póquer cuando leas las etiquetas de tus productos).
Aciano
El aciano es una planta medicinal de un precioso color azul intenso. Sus propiedades para la salud ocular se conocen desde muy antiguo. Por eso es un habitual en productos para el contorno de ojos, ya que el agua floral de aciano alisa y descongestiona la zona.

Este contorno de ojos de Payot contiene agua floral de aciano bio. 31,99 euros.
Algas
Son el grupo vegetal por excelencia de la flora marina y se conocen en torno a 25 000 especies, aunque solo unas pocas de ellas se utilizan en cosmética, con diferentes funciones que van desde alisar líneas de expresión a aportar luminosidad. La clave está en su riqueza en sales minerales.

Esta crema facial de The Body Shop contiene algas marinas en su formulación. Es ideal para pieles grasas porque controla los brillos y tiene una textura gel de rápida absorción. 20,00 euros.
Azeloglicina
Se formula condensando una molécula de ácido azelaico por dos de glicina (aminoácido de alta capacidad hidratante). "Es un activo multitasking con múltiples beneficios, que conserva las propiedades del ácido azelaico pero es menos irritante y no reseca la piel. Proporciona luminosidad y es antioxidante, seborregulador, antiinflamatorio, antimicrobiano, hidratante y mejora las manchas", apunta Ana Santamarina, fundadora de Santamarina Cosmetics.

Serum Global antiedad de Santamarina Cosmetics, con azeloglicina y ácido tranexámico. 43,90 euros.
Bakuchiol
De origen vegetal, fomenta la producción de colágeno tipo II, responsable de la elasticidad de la piel. Se le conoce como el retinol vegano por su efectividad frente a las arrugas. "Sin embargo, no da los problemas de irritación, descamación y rojeces que suele dar el retinol", advierte Estefanía Ferrer, ingeniera química especializada en formulación y fundadora de LICO.

Bio VIT-A Serum de Lico con bakuchiol. 46,90 euros.
Bidens pilosa
En ciertos ecosistemas tropicales se la considera una mala hierba pero en cosmética es otra alternativa bio al retinol. Entre sus capacidades, estimula la producción de colágeno, lo que disminuye la profundidad de las líneas de expresión; reduce la producción de melanina, atenuando las manchas e igualando el tono. “También tiene efecto seborregulador y antiinflamatorio y además es antioxidante”, detalla el fundador de Twelve Beauty.

Plant Perfection Gel Serum de Twelve Beauty, enriquecido con extracto, de Bidens Pilosa. 96,00 euros.
Caléndula
De fuerte color naranja, es una planta aromática cuyos beneficios para calmar la piel son un remedio conocido desde hace siglos. Sus propiedades reparadoras la convierten en un activo perfecto para pieles sensibles. Se utiliza en productos para el acné, las cicatrices o los eccemas.

Aceite de Caléndula Roll On de Gaura. 18,90 euros.
CBD
Se ha ido abriendo un hueco en los últimos años en el arsenal cosmético. El cannabidiol o CBD es uno de los principales cannabinoides que se encuentra en la planta de cannabis, pero (que no cunda el pánico) sin efectos psicoactivos. En cosmética tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, seborreguladoras y potenciadoras de la luminosidad.

Premium Cream Hidratante y reequilibrante, de CannaBeauty. 88,00 euros.
Ceniza de Bambú
Es un antibacteriano natural y antifúngico, perfecto para realizar una acción detox profunda e ideal para pieles grasas y propensas al acné.

Esponja Konjac Purifiying con ceniza de bambú de Usu Cosmetics. 6,25 euros.
Espino Amarillo
Hay textos medicinales chinos del siglo VII donde ya se hablaba de las propiedades de este arbusto con frutos pequeños y anaranjados. Su fortaleza en cosmética se debe a sus propiedades antienvejecimiento gracias a su riqueza en vitaminas C y E, y a su capacidad hidratante y reparadora, mejorando eccemas, quemaduras o cualquier tipo de irritación.

Aceite esencial Néctar 8 Flores Antiedad Global Éclat Sublime de Darphin. 170,00 euros.
Ginko Biloba
Árbol milenario chino, rodeado de magia y leyenda, es el último superviviente de su especie y se le considera "un fósil viviente", explica el doctor Leo Cerrud, experto en medicina estética. Su uso tópico en cosmética aporta propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, de aumento de la microcirculación y del flujo linfático, capacidad para combatir los radicales libres; tratamiento de manchas de pigmentación, anticelulítico, efecto reafirmante y rejuvenecedor; y aumento de la resistencia del cabello. "Por supuesto, todo esto hay que cogerlo con alfileres", advierte el doctor Cerrud. Funciona, "pero la intensidad de los resultados varía de persona a persona y cobra especial importancia la rutina, la constancia y la disciplina".

El Contorno de Ojos Herbera con Ácido Hialurónico, Ginkgo y Café es un poderoso aliado para el cuidado de la delicada piel alrededor de los ojos. 38,00 euros.
Hongos
Utilizados en Asia como ingredientes cosméticos milenios atrás, los más buscados por sus beneficios para la piel son el Reishi (antiinflamatorio), el Chaga (para unificar el tono), el Shitake (para la hiperpigmentación), el Cordypes (para hidratar y potenciar la producción de colágeno) y el Tremella (altamente hidratante).

Iris Firming PS de Foreo es un sérum nocturno para el contorno de los ojos con extracto de hongos regenerante. 74,90 euros.
Kigelia Africana
Árbol de origen africano común en Senegal, Tanzania, Mozambique, Kenia o Sudáfrica; de sus frutos se extrae un aceite de potente acción reafirmante y tensora. Las mujeres jóvenes africanas utilizan la pulpa del fruto maduro para realizar fricciones sobre los senos y así evitar la flacidez. También tiene propiedades estimulantes, seborreguladoras, antisépticas, antiinflamatorias, purificantes y antienvejecimiento.

Bronzgelia African Brown Tanner de AOKLabs, autobronceador de efecto reafirmante con kigelia africana. 22,45 euros.
Niacinamida
La vitamina B3 o niacinamida es una fusión de ácido hialurónico y la vitamina C. De popularidad creciente, tiene efecto calmante. "Además, es antioxidante, ayuda con la hidratación y con la pigmentación", señala Bella Hurtado, directora técnica de Boutijour.

Snow Lotus Firming Serum con niacinamida, de Boutijour. 90,00 euros.
Polen de girasol
Cargado de nutrientes y compuestos bioactivos, el polen de girasol se utiliza en productos cosméticos especialmente con fines antienvejecimiento, por su capacidad antioxidante y protectora frente al daño solar.

Exfoliante facial con gránulos de polen de girasol de Olivier Claire. 62,00 euros.
Soja
Su contenido en ácido glutámico ayuda a hidratar y suavizar la piel, reducir las líneas finas y mejorar la textura y la luminosidad.

Crema Limpiadora Facial Skin Recovery de Paula’s Choice con aceite de soja. 28,00 euros.
Zinc
Muchos cosméticos contienen zinc por sus múltiples efectos antiinflamatorios, antioxidantes, antibacterianos… En cosmética de protección solar se utiliza habitualmente el óxido de zinc.

Este sérum de The Ordinary es un éxito de ventas. Contiene un 10% de niacinamida y un 1% de zinc. Su sinergia hace que sea una fórmula antienrojecimiento de alta potencia. 6,00 euros.