El amor también llega a la realeza y esta vez ha sido la princesa Leonor la afortunada de sentir mariposas en el estómago. Con tan solo 14 años, a punto de llegar a la adolescencia, la heredera al trono ha puesto sus grandes ojos azules en un compañero de clase del exclusivo colegio al que acude. Por el momento, se desconoce la identidad del joven afortunado que se habría convertido en el novio de Leonor, pero según varios rumores formaría parte de una de las familias más acaudaladas de la capital española.
Según ha adelantado el medio argentino ‘Caras’, la hermana de la infanta Sofía podría haber encontrado ya el amor en este joven adinerado, algo que no habría hecho ni pizca de gracia a la reina Letizia, que habría puesto el grito en el cielo al conocer el romance de su hija. Como era de esperar, los Reyes habrían mostrado su reticencia a este noviazgo, al considerar que Leonor es todavía muy joven para comenzar los compromisos amorosos con otras personas. Además, y según el medio argentino, la reina Leticia se habría echado las manos a la cabeza, ya que en este momento, lo más importante para ella -y por ser su obligación como futura heredera al trono de España- es el hecho de atender todas las cuestiones referentes a la Corona española. Algo que no le ha sentado del todo bien a la Princesa, que habría manifestado su “rebeldía” asegurando que iba a seguir manteniendo la relación con su supuesto novio a pesar de las advertencias. Una cuestión primordial para Don Felipe y Doña Letizia, pues son los responsables de su educación y formación por ser la futura Reina de España.

A pesar de conocer bien la faceta tan estricta por parte de los Reyes en cuanto a la educación de sus hijas, cabe destacar que incluso el propio Rey de España también tuvo sus primeros enamoramientos en la adolescencia. Así, a los 17 años, el entonces Príncipe encontró su primer amor en los ojos de una joven aristócrata de buena familia española: Victoria Carvajal y Hoyos. ‘Vicky’, hija de los marqueses de Isasi, conoció a Felipe en el colegio Santa María de los Rosales, cuando ambos solían veranear juntos en Mallorca. Sin embargo, su amor no prosperó y su relación se quedó en un simple noviazgo de juventud.

Como todos sabemos, el primer amor nunca sale bien, por lo que el entonces joven Felipe volvió a abrir las puertas de su corazón y empezó una relación con Isabel Sartorius, hija del marqués de Mariño, Vicente Sartorius y Cabeza de Vaca. Aunque la relación parecía ir viento en popa, el hijo de la reina emérita decidió finalizarla al viajar a Estados Unidos para continuar con sus estudios.

Tras estos dos sonados romances, la prensa del corazón relacionó sentimentalmente al rey Felipe con varias mujeres. Los nombres que más sonaron en aquella época fueron Gigi Howard, a la que conoció mientras estudia en Georgetown; Viviana Corcuera, una relación que fue desmentida rápidamente por la reina Sofía en Mallorca, y Yasmeen Ghauri. No obstante, no fue oficial su romance con Eva Sannum hasta que, en 2001, el royal apareció acompañado de ella en la boda del príncipe Haakon y la princesa Mette-Marit de Noruega, donde parecía que por fin Felipe sentaba la cabeza.

Pero el amor duró poco y el tercer hijo de Juan Carlos I regresó a los breves romances, de los que destacaron personalidades como la mexicana Marcela Cuevas; la checa Alicia Krezjlova; Gabriela Sebastián de Erice, hija del embajador de España en Alemania; lady Gabriella Windsor, hija del príncipe Michael de Kent y bisnieta del rey Jorge V; Mencía Roca de Togores Lora, hija del conde de Luna y hasta la actriz Gwyneth Paltrow. Finalmente, el actual Rey de España conoció a Letizia Ortiz -quien por aquel entonces se ganaba la vida como periodista- y, pese a que a la pareja no le auguraban un futuro muy prometedor porque Letizia había pasado por un divorcio y tenía origen plebeyo, fue ella quien logró conquistar definitivamente el corazón del rey Felipe.