El fenómeno K-pop ha roto todas las estadísticas. Durante años, vimos crecer el amor por bandas musicales como BTS o Blackpink, mientras que, en paralelo, los K-dramas subían como la espuma en Netflix. Al mismo tiempo que el fenómeno coreano destacaba en cultural, el universo beauty caída rendido ante los cánones de belleza del país asiático.
Una piel resplandeciente y sin imperfecciones y un maquillaje natural y glowy son algunas de las bases de la belleza coreana a las que sumamos un estilo de flequillo que resulta un diez para las que sueñen con dulcificar sus facciones.
El Korean bang es un flequillo que recuerda al mítico cortina, pero que mantiene ciertas diferencias. En palabras de los expertos de Salón Secret, es "un flequillo muy sencillo que contiene menos cantidad de cabello que uno tradicional y entre los mechones desfilados se deja bastante hueco". Una de las principales características del flequillo coreano es que es semicircular. Por ende, es más largo por los laterales y más corto en la zona central.
Entre todas las ventajas de este flequillo, los profesionales destacan que es un estilo rejuvenecedor (que afina el rostro) y que permite un cambio de look poco radical. Además, encaja con diferentes largos de melena y no requiere una visita semanal a la peluquería.
Más allá de un corte adecuado (recomendamos que, si quieres apostar por un korean bang, lleves una foto de inspiración a tu peluquero de confianza) es esencial peinar el flequillo siguiendo ciertos pasos para lograr ese efecto tan único. Con el pelo un poco húmedo y un cepillo redondo, debemos secar en sentido contrario para crear el dinamismo. Finalmente, es interesante potenciar el volumen y aplicar una fina capa de laca para fijar el flequillo durante toda la jornada.
