Toda beauty lover de primera lo sabe: el maquillaje es "mágico". Mejor dicho, el maquillaje aplicado correctamente tiene el poder de generar el efecto que deseemos sin la necesidad de complicarnos mucho la vida. Si buscamos un aspecto dramático, nada mejor que jugar con sombras intensas y pintalabios oscuros, mientras que si soñamos con un clean makeup, tan solo necesitamos unificar el tono de la piel y añadir un toque de colorete.
Sin lugar a dudas, el colorete es uno de los productos que no suele fallar en nuestro neceser. Eso sí, aplicarlo correctamente varía en función de la forma de cada rostro. Los expertos de Maybelline recomiendan que los rostros ovalados opten por "aplicar el colorete en toda la mejilla con movimientos que vayan del centro del rostro y se vayan difuminando hacia todos los contornos".

Por otro lado, las mujeres con rostro cuadrado suelen poseer pómulos prominentes y una mandíbula fuerte y dibujada, así que aplicar el colorete "en la parte alta exterior del pómulo con movimientos circulares" es el consejo ofrecido por los maquilladores.
Finalmente, los rostros alargados debería emplear el colorete "en horizontal desde las aletas de la nariz hacia las orejas", al mismo tiempo que las caras redondas se verán beneficiadas al aplicar este producto por "debajo del hueso del pómulo, creando una línea imaginaria de mitad de la mejilla hacia las sienes de modo ascendente".
Además de poner en práctica los tips que proclamaran los profesionales del maquillaje, en Instagram hemos descubierto una técnica para aplicar el colorete que nos parece una pasada, ya que es mega sencilla y modificada la apariencia del rostro.
Tal y como vemos en el reel, el proceso no es complicado. En lugar de aplicar el colorete "a lo loco", debemos colocar el dedo índice de la otra mano justo por debajo de nuestro pómulo. Entonces, aplicamos el colorete por encima del dedo, en sentido ascendente. Así, logramos un efecto lifting instantáneo en apenas segundos.

La creadora de contenido Şeyma Toprak emplea colorete en polvo, así que recomendamos iniciarnos en esta técnica con una fórmula parecida. Una vez que le tengamos pillado el truco, podemos lanzarnos a usar otros formatos, como un colorete en barra o líquido.