Al final del invierno, los efectos de la falta de vitamina D y del frío suelen evidenciarse, en primer lugar, en el rostro, una zona especialmente expuesta a los cambios climáticos y a la radiación solar. La textura de la piel se vuelve más irregular, las ojeras y las manchas se acentúan y la tez se apaga. ¿El motivo? La falta de luminosidad.
En resumen, nos vemos más grises, con una piel cetrina y sin vida. Si bien es importante adaptar tu rutina de belleza en invierno para prevenir estos signos, también es posible aumentar la luminosidad de tu rostro una vez que se han manifestado (y en tan solo 10 minutos). Es cierto que de elevar la luminosidad de la piel se ha hablado largo y tendido, pero no tanto de la existencia de ciertos tratamientos SOS, como las mascarillas faciales iluminadoras instantáneas.
Hábitos que restan luminosidad a la piel
Es bien sabido que los expertos recomiendan dormir, al menos, ocho horas diarias para estar descansadas (y sí, esto se refleja en la piel restándole luminosidad). Sin embargo, muchas veces, con el ajetreo del día a día y los niveles del estrés en aumento, se nos hace difícil seguirlo a rajatabla.
Además, otros factores como llevar una alimentación sana, equilibrada y variada, practicar ejercicio físico con regularidad o evitar el tabaco, contribuyen a mantener una piel saludable y luminosa.
Pero ¿habías caído en proteger el rostro de las pantallas? La luz azul es una de las razones principales de la evidencia de la tez apagada. La farmacéutica Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia, recuerda la importancia de protegerse la piel a diario aun no habiendo salido de casa.
Para deshacerse del cutis apagado a largo plazo (y evitar que vuelva a aparecer), los expertos recomiendan realizar una doble limpieza para eliminar todas las impurezas, como la contaminación que oxida la piel y usar una crema protectora a base de antioxidantes.
Sin embargo, si necesitas un tratamiento SOS urgente para elevar la luminosidad de tu piel y acabar (de una vez por todas) con la tez apagada, lo ideal es recurrir a las mascarillas faciales iluminadoras, una solución rápida y efectiva que ha conquistado a las entusiastas de la piel.
Activos que han de tener las mascarilla iluminadoras, según los expertos
“El ácido glicólico, la vitamina C y E, el ácido hialurónico, la niacinamida o los retinoides, son algunos de los principios activos que contribuirán a restablecer el brillo cutáneo perdido”, cuenta la dermatóloga Arantxa Arana.
La vitamina C es, por supuesto, el ingrediente estrella para una piel radiante. Combate los radicales libres responsables del estrés oxidativo y del envejecimiento prematuro de la piel. Su poder aclarante también ayuda a reducir las manchas de pigmentación y unificar la tez. Muchas mascarillas faciales la incluyen en forma sintética o extrayéndola directamente de cítricos o frutas, como la cereza o el kiwi.
La cúrcuma también se ha posicionado como un ingrediente natural e iluminador a incluir. Es, principalmente, la curcumina la que hace que el rostro brille y recobre la luminosidad. Se dice que este ingrediente natural es 60 veces más antioxidante que la vitamina E.
“La eficacia de las mascarillas faciales iluminadoras reside en su formulación, ya que contienen concentraciones elevadas de activos. De hecho, depende del activo que contengan, se pueden utilizar para una necesidad de la piel u otra a modo de tratamiento SOS. Desde corregir una tez apagada, hasta conseguir un efecto lifting, mitigando las arrugas, o revitalizando la piel cansada”, concluye la farmacéutica Rocío Escalante.
Mascarillas faciales para devolver la luminosidad al rostro en 10 minutos
Los cutis apagados y cansados pueden confiar en Turmeric & Cranberry Seed Energizing Radiance Masque, de Kiehl's (23 €), una mascarilla enriquecida con arándanos y cúrcuma. Su fórmula vigorizante exfolia suavemente y le da a la piel un brillo húmedo como si hubieses dormido las ocho horas recomendadas.
La nueva Cryo-Flash Cream-Mask, de Clarins (63 €), no solo te devolverá la luminosidad al rostro en 10 minutos, sino que contiene tratamiento flash antiedad con efecto tensor inmediato. Su must es que reproduce los beneficios del frío sobre la piel para prevenir y combatir los signos de la edad.
Active Mascarilla Ampolla Vitamina C, de Garnier Skin (3,85 €), es una mascarilla facial de tejido que ilumina y combate los signos de fatiga de la piel, con extracto de piña y vitamina C. Resultados visibles en solo 5 minutos. Piel intensamente rehidratada, descansada y energizada.
La Red Pepper Paste, de Erborian (39 €), es una mascarilla facial iluminadora ultra concentrada. Contiene pimiento rojo utilizado tradicionalmente en Corea. Extraído de la pulpa de la fruta, es reconocido por su excepcional poder energizante que transforma la luminosidad de la piel desde la primera aplicación.
Por último, pero no por ello menos importante, Radiance Glycolactic Renewal Mask, de Ren Clean Skincare (41,99 €), es una mascarilla que devolverá la luminosidad a tu piel en 10 minutos, a la vez que la exfolia y afina la textura. Todo ello gracias a su concentración en ácido glicólico y otros ácidos de frutas.
