La relación entre el príncipe Harry y Meghan Markle continúa siendo objeto de especulación, ya que los rumores de crisis y divorcio persisten en medio de su vida alejada de la realeza británica. Aunque la pareja se trasladó a Estados Unidos en busca de una vida más tranquila, los desafíos parecen haberlos alcanzado.
Recientemente, se ha observado un distanciamiento entre el príncipe Harry y Meghan Markle, lo cual ha llevado a algunos a cuestionar el estado actual de su matrimonio. Según medios ingleses fuentes cercanas a la pareja sugieren que han surgido diferencias significativas entre ellos, lo que ha generado tensiones y dificultades para encontrar una solución.
Uno de los eventos que ha generado mayor especulación fue la falta de celebración de su quinto aniversario de bodas, un gesto que llamó la atención de los medios y aumentó los rumores de una posible crisis matrimonial. Además, momentos capturados públicamente, como cuando el príncipe Harry intentó besar a Meghan durante un partido de la NBA y fue rechazado, han alimentado aún más las especulaciones sobre su relación.
Otro factor que ha contribuido a las tensiones es la presión de la Familia Real británica. Según informes, desde el Palacio de Buckingham se ha insinuado la posibilidad de que el príncipe Harry regrese al Reino Unido y se convierta en un miembro activo de la Corona, pero a costa de poner fin a su matrimonio con Meghan Markle. Esta sugerencia ha generado conflictos internos y ha complicado aún más la situación.
La incertidumbre sobre la custodia de sus hijos también se ha convertido en un tema de preocupación. Si la pareja decide separarse, surgirían preguntas sobre quién se quedaría con la custodia de sus hijos, dado que actualmente viven en países diferentes.
