El Principito es una de las obras más relevantes de la cultura universal. El escritor y aviador francés Antoine de Saint-Exupéry - que fue piloto militar al comienzo de la Segunda Guerra Mundial- enamoró al mundo en 6 de abril de 1943 con la publicación de Le Petit Prince, una novela corta que ha cambiado el curso de la historia.
Fábula mítica y relato filosófico, El Principito ahonda en temas tan profundos como el sentido de la vida, la autoestima o el amor en todas sus facetas. Incluido entre los mejores libros del siglo XX en Francia, esta breve novela es el libro escrito en francés más leído y más traducido del mundo.
El principito es un relato considerado un libro infantil por la forma en la que está escrito e ilustrado (mediante la técnica de la acuarela), pero estamos ante una audaz presentación de los innumerables dilemas a los que nos enfrentamos los adultos a lo largo de nuestra vida. Además, expone las infinitas dudas a las que nos enfrentamos a diario. Bello tanto en su forma como en su contenido, esta novela ha logrado algo muy complejo: unir a varias generaciones en una misma historia.
Este relato está formado por frases de lo más inspiradoras que nos pueden ayudar a entender la vida de otra forma. Entre todas las afirmaciones dedicadas al amor, existen una serie de frases que se han quedado grabadas a fuego en nuestra memoria y que merecen un espacio en todos los corazones. El principito nos enseña a valorar en amor como una de las principales fuerzas que da sentido a nuestra existencia. Este amor, que radica en la familia, la amistad, la pareja y en nosotras mismas, es el motor de un camino repleto de felicidad y abundancia.
