Aunque muchas de nosotras planteamos las vacaciones como un momento de descanso, es cierto que escapar de la rutina nos puede ayudar a alimentar nuestro deseo sexual y a disfrutar de momentos de amplia conexión con nuestra pareja. Pese a que debemos dejar a un lado la presión y las expectativas que no conducen a ninguna parte, disfrutar de tiempo libre suele conducirnos a sentirnos más abiertos a nuevas experiencias.
La Dra. Emily Jamea es una reconocida terapeuta sexual y de parejas. Además, es la escritora de títulos como 'Anatomy of Desire: Five Secrets to Create Connection and Cultivate Passion' ('Anatomía del deseo: cinco secretos para crear conexión y cultivar la pasión'), una interesante guía acerca de cómo fomentar el deseo. Más allá de su faceta como terapeuta y escrita, es la voz de 'Love & Libido Podcast'.
Jamea también colabora en medios como CNN, USA Today o NBC y no duda en acudir a otros podcast relacionados con sexo y relaciones de pareja, como 'Sexology Podcast' dirigido por la Dra. Nazanin Moali. En el capítulo 364 de este podcast, titulado 'Why Vacation Sex is What You Need for Your Relationship with Emily Jamea' ('Por qué el sexo en vacaciones es lo que necesitas para tu relación con Emily Jamea') es una joya absoluta que merece poco más de 30 minutos de tu atención antes de partir de viaje. En esta conversación entre doctoras, Jamea ofrece varias claves para alimentar el deseo en los días de vacaciones y estos son algunos consejos de fácil adopción para disfrutar de unas jornadas tórridas y placenteras.
Adiós al teléfono (o a cualquier elemento que nos recuerde a nuestra rutina)
La experta en relaciones señala que "el sexo en vacaciones suele ser especial debido a una ruptura con la rutina". Eso sí, para lograr una desconexión debemos trabajar por nuestra parte en el intento de dejar atrás todas aquellas cosas que nos estresan durante las jornadas de oficina. De poco sirve ir a la otra punta del mundo o a cualquiera de nuestras playas si estamos constantemente revisando el mail. De eso nada, adiós teléfono lo máximo posible. Así, notarás como el deseo aparece de una forma mucho más natural. "La reducción del estrés durante las vacaciones contribuye a un mayor deseo sexual", destaca Jamea.
Ir poco a poco y no quererlo todo nada más llegar al hotel
Quizá tengas suerte y nada más llegar a tu destino vacacional la llama se encienda, pero no es lo más habitual. Sea para adoptar nuevas prácticas o para hacer saltar la chispa que está apagada, la profesional recalca la importancia de "empezar poco a poco". El deseo se cultiva con la paciencia, los mimos, las caricias y los gestos sutiles que despiertan esa pasión. Darse tiempo es fundamental para lograr una relación sexual plenamente satisfactoria (sobre todo, cuando no hay un hábito).
Comunicar las expectativas en casa ayuda a ir allanando el terreno
La comunicación es la base de toda relación, sea de amor, de amistad o familiar. Por supuesto, con nuestra pareja debemos saber hablar de sentimientos y también de sexo. Si consideras que, para ti, las vacaciones son un momento ideal para reconectar en el campo sexual, házselo saber a tu pareja. Así, podréis entablar una conversación al respecto para acudir al destino con unas expectativas similares. Jamea señala que es importante "discutir las emociones y experiencias deseadas".
Uno de los aspectos que puede arruinar nuestro objetivo es imaginar una cosa y que suceda otra. Una cena tranquila es un instante estupendo para comentar qué esperáis cada uno de estos días de relax. Dejar a un lado la vergüenza y expresar nuestros pensamientos es el primer paso para gozar de una vida sexual placentera y adaptada a nuestros deseos y necesidades.
