Lo hemos leído o escuchado en multitud de ocasiones en boca de sus protagonistas: para los intérpretes, rodar escenas de sexo no es cómodo en absoluto. Una escena de sexo atractiva para los espectadores en la gran pantalla es el resultado de una compleja coreografía que implica no solo a los actores y actrices, sino a todo un equipo técnico que incluye a cámaras, sonidistas, iluminadores, maquillaje, peluquería y a un director dando indicaciones precisas en todo momento. Es decir, el mismo proceso que para rodar cualquier otra escena, pero tratando un material muy íntimo y sensible. El resultado, por supuesto, tiene que ser lo más natural y verosímil posible, al igual que el resto del metraje.
Demi Moore lo ilustra perfectamente en su libro de memorias Inside Out, contando anécdotas sobre el rodaje de las escenas más calientes de su filmografía, que incluye títulos con alto contenido sexual como Striptease o Una proposición indecente. Ella ha sido una de las que más y mejor se han desnudado en la gran pantalla y por ello, entre otros factores de taquilla, llegó a convertirse en la actriz mejor pagada de Hollywood.
Las cláusulas sobre desnudos o participación en escenas sexuales que establecen las grandes estrellas en sus contratos forman parte del material informativo más jugoso del mundo del cine. Muchas de ellas trascienden por sus peculiaridades y algunas se han llegado a sacar tanto de contexto que se han convertido en auténticas leyendas urbanas.
Los motivos que alejan a las actrices de este tipo de escenas son diferentes. Los más habituales aluden a la maternidad, es decir, a que tienen hijos pequeños y sienten que es inapropiado participar en secuencias de sexo más o menos explícitas; también pueden referirse a que no les gusta la estética de este tipo de planos o, simplemente, se sienten incómodas a la hora de mostrar su cuerpo al natural o al interpretar uno de los instintos más primarios del ser humano.
Las siguientes diez actrices se han negado a desnudarse en una película. Te contamos cuáles son los motivos que les han llevado a tomar esta decisión.
Julia Roberts
El papel de la prostituta Vivian Ward en Pretty Woman fue el que lanzó definitivamente a Julia Roberts a la fama. En esta película protagonizó varias escenas de sexo con Richard Gere. Sin embargo, ha dejado de estar interesada en ellas aludiendo al que considera que es el papel más importante de su vida, el de madre.

Scarlett Johansson
Scarlett Johansson solo se ha desnudado una vez y ha sido en la película Under the skin que, aunque se estrenó en Estados Unidos en 2014, ha llegado a las pantallas españolas en este 2020. El motivo de este único desnudo se debe a que, según ella, en esta ocasión está totalmente justificado en el guion.

Blake Lively
En 2012, Blake Lively confesó en el Daily Mail: “Cuando veo desnudos en las películas, siempre me distraigo con eso. Sé que si estoy viendo una escena en la que alguien enseña sus pechos, entonces eso es todo lo que veo y no puedo evitarlo. Simplemente, no creo que eso sea lo mejor para mí”. Aún así, en 2016 cambió de opinión y se desnudó en All I see is you.

Anna Kendrick
La protagonista de Love life (HBO) es de las que tienen muy claro que no está interesada en desnudarse en una película. De hecho, usó a una doble de cuerpo en Mike y Dave buscan rollo serio (2016), en una escena en la que su personaje muestra el culo.

Olivia Munn
Su escena de topless en Magic Mike (2012) se ha convertido en uno de los contados casos en los que la actriz ha aceptado desnudarse. También ha confesado que "lo haría por muy pocos directores".

Sarah Jessica Parker
¿Te has fijado en que Sarah Jessica Parker no sale casi desnuda en Sexo en Nueva York, en comparación con sus compañeras de reparto? Esto se debe precisamente a que su cláusula de no-nudity fue la más estricta de todas.

Jennifer Garner
Aunque ha protagonizado escenas de sexo, Jennifer Garner se niega a desnudarse completamente. En una entrevista concedida a MTV en 2009 comentó: "No me lo quitaré todo. No, gracias. El mundo se merece algo mejor, no me interesa".

Mila Kunis
La protagonista de Aquellos maravillosos 70 sí ha rodado escenas de sexo - en Cisne negro, por ejemplo - pero decidió utilizar un doble de su trasero en la película Con derecho a roce.

Rebel Wilson
También hizo uso de una doble de cuerpo en la película Agente contrainteligente, ya que incluyó una cláusula de no-nudity expresamente en su contrato.

Megan Fox
Aunque es considerada una sex-symbol, Megan Fox se niega a desnudarse íntegramente . "No puedo imaginarme saliendo desnuda en una película. Eso se queda para siempre, especialmente ahora, con Internet. Simplemente, no puedo. Literalmente, lo único que me queda para mí misma son mis partes íntimas, y no quiero compartirlas con el mundo. Me gustaría mantenerlas en privado", afirmó en una entrevista con MTV News en 2009.
