¿Está de moda donar entre los multimillonarios?: Un experto analiza el nuevo concepto de estatus de la élite

Un experto en estatus analiza los motivos que se esconden tras la oleada de donaciones por parte de conocidos multimillonarios.
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Donald Trump y Melania Trump el Día de Investidura del nuevo presidente de Estados Unidos - GTRES

Hay gente que tiene tantísimo dinero que no podemos ni siquiera llegar a imaginar una cantidad tan elevada. Sí, no todo el mundo estragos para llegar a final de mes. De hecho, existen personas tan ricas que "regalan" el dinero con el afán de dejar claro al mundo que son poderosos, muy poderosos, además de buscar librarse algún que otro impuesto. El licenciado en Historia y Periodismo por la Universidad de Oregón, Chuck Thompson, es experto en posición social y estatus y uno de sus libros más exitosos, La revolución del estatus, la increíble historia de cómo lo vulgar se convirtió en sofisticado es una lectura prácticamente obligatoria para todos los interesados en todas las caras que esconde la riqueza.

En los últimos años, hemos observado un cambio radical en cómo las élites manejan su riqueza y su imagen pública. Antes, los indicadores tradicionales de estatus como coches de lujo, mansiones y viajes extravagantes eran los símbolos más visibles de éxito. Ahora, un nuevo tipo de prestigio ha surgido: la filantropía. Este fenómeno, descrito en detalle por Chuck Thompson en La revolución del estatus, redefine las reglas del juego. Según Thompson, "el estatus ya no es para los elegidos. Es para todos". Esta afirmación encapsula un cambio cultural que, lejos de ser una moda pasajera, parece consolidarse como una norma entre las élites globales. Además, nunca está de más recordar que el dinero y la felicidad no van tan unidos como pensamos o eso admite un profesor de Harvard.

Por qué donar es el nuevo símbolo de estatus

Una transformación impulsada por la virtud

La idea de que el estatus puede ser inclusivo es una revolución en sí misma. Thompson señala que "mucho antes de que naciéramos, el estatus se consideraba un bien finito en un juego de suma cero". Sin embargo, esta mentalidad ha evolucionado. En la actualidad, los multimillonarios utilizan su riqueza para promover causas sociales como la justicia racial, el cambio climático y la educación (aunque también hay una cara B en esta historia). Este cambio está profundamente ligado a la percepción de virtud. Como escribe Thompson, "la noción de estatus se ajusta a menudo a la famosa definición de pornografía del Tribunal Supremo: lo reconoces cuando lo ves" . En este caso, la filantropía se ha convertido en la señal más clara de un estatus elevado. Por ejemplo, en terreno nacional, Amancio Ortega, a través de su fundación, donó 100 millones de euros en apoyo de todas las víctimas y afectados por la DANA, una noticia ofrecida por medios generalistas como El Confidencial.

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'La revolución del estatus, la increíble historia de cómo lo vulgar se convirtió en sofisticado', Chuck Thompson

La revolución del estatus, la increíble historia de cómo lo vulgar se convirtió en sofisticado

Chuck Thompson

Las razones detrás del cambio

Hay múltiples factores que explican este fenómeno. Uno de ellos es la presión social. En un mundo donde las redes sociales exponen cada movimiento de las figuras públicas, no basta con ser rico; es necesario ser visto como "bueno". Esto explica por qué las grandes fortunas están donando millones a fundaciones o creando iniciativas para mejorar el mundo. Como comenta Thompson, "una mayor apreciación de la nueva teoría del estatus puede mejorar muchos problemas" . La filantropía no solo mejora la reputación de los donantes, sino que también crea un impacto tangible.

De la ostentación al impacto

Una rebelión contra las antiguas medidas de estatus

En su libro, Thompson detalla cómo la sociedad ha comenzado a rebelarse contra las manifestaciones tradicionales de riqueza. "La ostentación me aburre y siempre me ha aburrido", confiesa el autor. Este sentimiento es compartido por muchas personas que prefieren ver actos de generosidad en lugar de opulencia. En un giro interesante, los multimillonarios han adaptado sus estrategias para alinearse con estas nuevas expectativas. Ejemplo de ello son iniciativas como el Giving Pledge, impulsado por Bill Gates y Warren Buffett, que pide a las personas más ricas del mundo que donen al menos la mitad de su fortuna a causas benéficas.

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Bill Gates, uno de los hombres más ricos del mundo, en el Clinton Global Initiative (CGI) - Getty

La influencia de movimientos sociales

Además de la presión social, los movimientos por la justicia social y racial han desempeñado un papel crucial en este cambio. Según Thompson, "el estatus, el lujo y el privilegio están cambiando radicalmente". Este contexto ha llevado a los multimillonarios a usar su riqueza como una herramienta para el cambio social, un movimiento que no solo beneficia a las causas que apoyan, sino también a su imagen pública.

¿Qué significa esto para nosotras?

Aunque no todas tenemos millones para donar, el cambio en la percepción del estatus tiene implicaciones para toda la sociedad. Como señala Thompson, "los símbolos de estatus permiten a los seres humanos cooperar a nivel masivo". Esto implica que los actos altruistas no solo benefician a quienes los reciben, sino que también refuerzan los lazos sociales. Así que, ya sea donando tiempo, dinero o recursos, todas podemos participar en esta revolución del estatus.

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Amancio Ortega y Marta Ortega, dos de las personas más ricas de España - Getty Images

Entonces, ¿estamos ante una moda o nuevo paradigma?

La filantropía entre los multimillonarios no es simplemente una tendencia pasajera, o eso opina Thompson. Es un reflejo de cómo las reglas del estatus se están reescribiendo en tiempo real. Como señala el historiador y periodista, "el orden que tradicionalmente han proporcionado el estatus y el prestigio se está transformando". En un mundo donde las divisiones sociales y económicas son cada vez más evidentes, este cambio podría ser el comienzo de una era más inclusiva. ¿Estamos listas para seguir este ejemplo y redefinir nuestro propio estatus? En tiempo dará respuesta a esta incógnita.

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