Desde hace unas semanas, una estética ha inundado nuestras redes sociales. Es bastante reconocible, llamativa y, a priori, chocante. No se trata ni más ni menos que del portuguese girl style o, dicho en español, el estilo de chicas portuguesas. Esta tendencia, caracterizada por mezclar los colores más vivos de la gama cromática, así como texturas y estampados de lo más extravagantes ha creado una gran polémica entre las fashionistas.

Aunque la controversia no sólo viene por su apariencia estrafalaria, sino porque, aunque hablamos de él como el "estilo portugués", no ha nacido en Portugal y ni siquiera es una estética reciente. En realidad, su origen está en Copenhague y vio la luz a manos de las danesas durante el 2020. Sin embargo, sí es cierto que las portuguesas han hecho una extensión de la estética añadiendo elementos propios.
Independientemente de quiénes lo crearan, lo cierto es que el portuguese girl style es tendencia absoluta, pero existen ciertas normas para conseguir defenderlo adecuadamente con estampados que, a simple vista, no pegan en absoluto pero sí lo hacen en el fondo. Y lo harán a través del color: siempre habrá un tono que hará de hilo conductor y que estará presente en todas las prendas de look.

Una vez está esto claro, existen cuatro claves para llevar a cabo con buen resultado el estilo portugués y confiar en el resultado:
- Combinar más de cuatro colores en un mismo estilismo
- Añadir texturas y estampados llamativos
- Escoger prendas con volúmenes en mangas y cuellos
- Y mantener estructuras rectas y holgadas

Muchas hemos visto el estilo portugués como una vía de escape de la tendencia Old Money, caracterizada por la sobriedad y neutralidad. Pero, por motivos de tonalidades y estampados, habrá quienes no se atrevan a poner la estética portuguesa en práctica hasta bien entrada la Primavera/Verano 2024.
