Seamos honestas: ser productivas puede ser una odisea en ocasiones. Da igual la disciplina que tengamos, hay días en los que simplemente no salen las cosas y que da la sensación de que por mucho que intentemos concentrarnos para llevar a cabo una tarea, nuestra mente parece tener otros planes y nos dispersamos o distraemos a la mínima.
Es precisamente en estos días cuando más atención plena le tenemos que poner a lo que estamos haciendo, para así mejorar nuestra productividad y conseguir nuestros objetivos. Conocer técnicas y trucos de experto para ser más productivas es crucial en esos días para conseguir ese empujón extra: el método pomodoro, el "modo monje", la técnica de "comerse una rana"...
Hoy no vamos a hablar sobre ningún método concreto, sino que vamos a analizar los consejos que dan desde Harvard para mejorar nuestra productividad y ser más efectivas. La clave está en analizar nuestro entorno y a nosotras mismas, detectando qué es lo que puede fallar y cómo solventarlo. Toma nota porque estos consejos de Harvard quizás te sean de lo más útiles:
Los mejores consejos de Harvard para ser más productiva
1. Identifica los factores que influyen en tu productividad
Desde Harvard han elaborado un listado que incluye más de 10 motivos que, directa o indirectamente, influyen en nuestra productividad. Una lista interminable que trata desde el espacio de trabajo o la ergonomía de él, hasta el sueño, ejercicio o la alimentación que seguimos. Pasando por el horario en el que trabajamos, las pausas que hacemos o las posibles distracciones que tenemos.

También valora nuestro estrés, la energía mental que necesita la actividad y nuestra motivación, así como la capacidad para resistirnos a estos impulsos de distracción. "Piensa en una estrategia para mejorar cada área y aplíquela de una en una. Empieza por una estrategia que sea fácil de poner en práctica, pero que probablemente produzca un aumento notable de la productividad, para sacar el máximo partido a tu inversión" explican.
2. Haz un horario estratégico
"A la hora de revisar tu horario semanal, debes pensar cuándo haces cada tipo de tarea si quieres maximizar la productividad" comienzan. Algo que debe hacerse atendiendo a las particularidades de cada uno, porque "todo el mundo tiene momentos del día de energía alta, media y baja.Fíjate en los momentos del día en los que tu mente está despierta y tienes energía, para planificar ahí las tareas más difíciles, las que requieren mucha energía mental".
3. Prueba temporizadores
"Un método de temporizador muy popular es la "Técnica Pomodoro", en el que muchos usuarios encuentran una ayuda para equilibrar el tiempo enfocado y el no enfocado" comienzan. Una técnica que nosotras conocemos muy bien y que sabemos aplicar a la perfección (aquí tienes todo sobre el método pomodoro).

La clave aquí es encontrar qué es lo que mejor te va a ti. "Cada persona es diferente, así que ten en cuenta tus niveles de energía y evita el agotamiento. El trabajo académico también varía: a veces se necesita tiempo concentrado para realizar tareas específicas, mientras que otras veces se necesita tiempo libre para encontrar nuevas ideas y enfoques".
4. Controla tus distracciones externas
Las claves para ellos son:
- Silenciar y ocultar nuestro teléfono móvil.
- Utilizar programas de bloqueo para limitar el acceso a Internet.
- Utilizar tapones para los oídos o auriculares.
- Poner un cartel que diga "Ahora no. Estoy trabajando".
- Trabajar cuando la casa esté en silencio.
- Colocarse de espaldas al tráfico.
5. Controla tus distracciones internas
Las claves para ello son:
- Poner el teléfono en otra habitación.
- Mantener una almohadilla de distracción.
- Utilizar el ruido ambiente.
- Hacer pausas programadas.