
Las mejores ideas eróticas para desatar la pasión con tu pareja esta primavera
Si la rutina, la ausencia de comunicación o la falta de interés empiezan a imponerse en tu relación, no lo dudes, esta primavera es el momento de retomar el control.
Tras varios años en una relación con tu pareja, es bastante normal que no consigas notar la pasión y el ardiente deseo del principio de la misma. Recordarás con algo de nostalgia los primeros meses en los que no podíais pasar más de una tarde sin hacer el amor. Desde entonces, la llama del amor sigue presente, pero puede que la del deseo sexual no sea tan fuerte como debería. Pero ojo, esto no significa que todo esté perdido para siempre, sino que puede que el sexo con tu pareja necesite un latigazo (en todos los sentidos), un nuevo enfoque o que necesitéis reinventaros...
¿La clave? Antes de probar o intentar cualquier cosa nueva, tenéis sin duda alguna que comunicaros y hablar. Aunque pueda parecer algo básico y tengas mucha confianza con tu pareja, puede que no siempre te atrevas a decirle lo que realmente quieres o sientes. ¡Error! No te avergüences de pedirle cosas que te excitan, aunque no sean habituales o 'normativas' y procura ser abierta y comprensiva ante sus gustos y deseos. Pero recuerda, nunca hagas nada por obligación. Para una vida sexual feliz, ambos tenéis que tener claro qué os apetece y cuáles son vuestros límites, para que ninguno de los dos se tenga que ver en una situación que no le haga sentir a gusto o bien. Y aunque ya lo sabrás de sobra, es también el momento de decir adiós a tus complejos y a tus bloqueos sexuales. Tu pareja te quiere tal y como eres, por lo que no es necesarios que ocultes estas zonas de tu cuerpo que tanto te desagradan. Si confías en ti y te sientes sexy, lo notará y vuestra relación será más intensa.
Antes de que decidas tirar la toalla y te conformes, toma nota de estas 15 ideas eróticas, sencillas y muy poco costosas que te proponemos para reavivar la llama y desatar la pasión esta primavera. Ya sabes que la primavera la sangre altera... Fuera complejos, prejuicios y otros miedos. Es el momento de reconquistar y disfrutar de tu vida sexual. Como os lo merecéis.

Puede resultar sorprendente y sin embargo, un viaje en pareja siempre funciona. Solos, en un nuevo sitio y un paisaje desconocido y de ensueño... ¿Qué más pedir? Todos los ingredientes estarán reunidos para teneros ganas de nuevo. Con que sea una escapada rural puede valer, por ejemplo...

¿Eres activa? Sé pasiva. ¿Eres pasiva? Sé activa. Si tenéis "roles" muy definidos a nivel sexual (de forma consciente o no), es el momento de probar un cambio. Toma la iniciativa si siempre lo hace tu pareja o déjalo/a al mando. Se sorprenderá para bien.

Ambos tendréis sin duda alguna una agenda repleta y pocos momentos para coincidir. Convertid este problema en una oportunidad con visitas sorpresas, por ejemplo en el trabajo. Aunque sea media hora, este inesperado momento os alegrará el día (en todos los sentidos).

Puede que ya tengas y uses juguetes sexuales para placeres solitarios, pero recuerda que también puedes probarlos con tu pareja. Existen en la actualidad numerosas webs especializadas que venden juguetes complementarios que os harán disfrutar tanto a uno como a otro. ¿No crees que merece la pena?

No esperes a Halloween para disfrazarte de conejita o de bruja sexy. Para una noche especial, no dudes en cambiar por completo de look y sorprender a tu pareja con un disfraz muy sensual.

Ya que vivimos en una era de conexión y comunicación constante (vivan las redes sociales y los smartphones), aprovechad. Nada mejor que un mensaje picante antes de llegar a casa para empezar a excitaros mutuamente. O una videollamada...

Cama o sofá. Estas suelen ser vuestras dos opciones. No dudéis en buscar nuevos lugares para tener sexo, incluso en casa o en el coche. Eso sí, cuidado con los lugares públicos...

Si soléis ir directamente al grano, los masajes serán sin duda alguna claves para reavivar la llama. Completamente desnudos, disfrutad de este momento de relax para calentar motores.

Sí, leer solos o juntos libros eróticos puede ayudaros a reavivar la llama. Inspiraos y copiad ideas de obras literarias...

Nombre, profesión o incluso edad: sé quien quieras ser durante unas pocas horas. Convertíos en completos desconocidos (podéis incluso ir más allá fingiendo un encuentro) y descubrid de nuevo vuestros cuerpos. Excitación garantizada.

El silencio os puede paralizar (por vergüenza o por miedo a que os escuchen), por lo que no dudéis en probar a hacer el amor con una buena música de fondo. Estas son las mejores canciones para tener sexo.

¿No te atreves con el sexo anal por miedo? ¿No soléis probar nuevas posiciones? No se trata de aprenderse de memoria el Kamasutra, sino de arriesgar (siempre y cuando tengáis ganas) y no dejaros llevar por preocupaciones o prejuicios. Olvidaros de lo que supone que deberiáis hacer o de lo que te recomiendan tus amigas para intentar y probar. No hay nada vergonzoso o asqueroso mientras disfrutéis.

Aunque las ganas van más allá de vuestros atuendos respectivos, es bueno sorprenderos con lencería o ropa interior inesperada y sexy. Hazte con un conjunto de encaje o de seda de un color poderoso (el negro y el rojo son las opciones ideales) y sorprende una noche a tu pareja. Si está acostumbrado a verte llevar algodón, triunfarás.

Nada de quitarse rápidamente la ropa si lo hacéis habitualmente. Es el momento de reaprender el delicado arte de desnudarse y de miraros. Aunque creas que puedes precscindir de ello, esta etapa puede ser clave para excitaros y conseguir relaciones más placenteras. Tomaros el tiempo.

Besar hace saltar todas las alarmas, es el preámbulo, el acto que encenderá de forma inmediata el deseo. Probad un día con un nuevo juego: dime dónde te beso. Apuntad en papelitos diferentes zonas del cuerpo, dobladlos y coged uno al azar. O usad un dado... ¿Es necesario añadir algo más?