En Un deseo irlandés, Lindsay Lohan regresa a la pantalla grande con esta película dirigida por Janeen Damian, en lo que ya se ha convertido en su regreso triunfal a la comedia romántica. ser un retorno triunfal a la comedia romántica.
Recordamos que Lindsay solo tenía 10 años cuando, tras interpretar a Alexandra Alli Fowler en Another World, empezó a acaparar la atención de los medios por su carisma y facilidad para interpretar cualquier personaje.
Después de realizar decenas de anuncios publicitarios, con 15 años, Lohan ya era una estrella de Disney. Después de arrasar con Tú a Londres y yo a California, Harvey a tope, Devuélveme mi suerte y la inolvidable Chicas malas, la presión de la fama pudo con ella y la actriz decidió alejarse de Hollywood.
"Siento que parte de mi trabajo quedó eclipsado por los paparazzi y todo ese tipo de cosas cuando era más joven, y eso es algo molesto. Ojalá esa parte no hubiera ocurrido. Sentía que no tenía el control de mi propia vida, por eso quise desaparecer", ha explicado Lohan en una reciente entrevista.
¿De qué va 'Un deseo irlandés?'
Afortunadamente, la intérprete ha vuelto por la puerta grande regalándonos una de las mejores comedias románticas del mes. Un deseo irlandés sigue el día a día de una talentosa editora y escritora que vive enamorada en la sombra del novelista con el que trabaja.
Cuando Paul Kennnedy anuncia su boda con la mejor amiga de Maddie, ella no tiene más remedio que seguir ocultando sus sentimientos, mientras promete acompañarles en su gran día. Sin embargo, Maddie pasa de ser una de las damas de honor a la novia de la boda tras pedir un deseo a antigua piedra irlandesa.
Con su sueño aparentemente hecho realidad, Maddie pronto se da cuenta de que su verdadera alma gemela es alguien completamente diferente, un fotógrafo que acaba de conocer y al que no puede pedirle una cita por culpa de un deseo cumplido que ya no es tan deseado...
Traducida en su idioma original como Irish Wish, la película dura solo 93 minutos, ha sido escrita por de Kirsten Hansen y producida por Brad Krevoy y Michael Damian. Se rodó en Wicklow, Irlanda, lugar de ensueño por sus impresionantes vistas y rica historia.
El reparto incluye a Ed Speleers, Alexander Vlahos, Elizabeth Tan, Ayesha Curry y Jane Seymour, junto a Jacinta Mulcahy, Matty McCabe y Dakota Lohan, ofreciendo una exploración profunda del encantador escenario irlandés a través de sus personajes.
