La industria de la moda está viviendo una revolución silenciosa pero imparable: la llegada de materiales sostenibles inspirados en la naturaleza. Entre ellos, el micelio fúngico, un cuero vegano hecho de hongos que se ha convertido en uno de los protagonistas de la nueva era de la moda eco-friendly. Diseñadores de renombre como Stella McCartney ya han apostado por este material, el cual no solo imita la apariencia del cuero animal, sino que también ofrece una alternativa sostenible, vegana y de bajo impacto ambiental. Pero ¿qué hace tan especial a este material y cómo la biotecnología está transformando la industria textil? Te lo contamos.
La biotecnología al servicio de la moda sostenible
La biotecnología ha abierto una nueva era en la moda sostenible, permitiendo la creación de materiales innovadores a partir de procesos ecológicos y recursos renovables. Gracias a esta forma de fabricación, es posible desarrollar tejidos a partir de microorganismos, fermentación y estructuras vegetales sin depender de la explotación animal o petroquímica.
Uno de los avances más destacados es la producción de fibras similares a la seda sin necesidad de gusanos de seda, mediante proteínas sintéticas obtenidas por fermentación microbiana. Empresas como AMSilk y Spiber han logrado replicar la estructura molecular de la seda de araña, dando lugar a tejidos resistentes y biodegradables. Otra alternativa es el Brewed Protein, una fibra desarrollada mediante fermentación de organismos modificados genéticamente para generar proteínas estructurales.
Asimismo, la bioingeniería ha permitido la creación de tintes naturales obtenidos a partir de bacterias y algas, eliminando el uso de químicos tóxicos en la coloración de textiles. También se han desarrollado procesos de reciclaje enzimático para descomponer prendas usadas en sus componentes básicos y fabricar nuevos tejidos sin generar residuos. Estos avances reflejan cómo la biotecnología no solo revoluciona los materiales de la moda, sino que también impulsa un sistema de producción más eficiente, sostenible y alineado con las necesidades del planeta.

Micelio fúngico: la alternativa sostenible al cuero animal
El micelio fúngico es la estructura vegetativa de los hongos, una red de filamentos que, con el tratamiento adecuado, puede convertirse en un material flexible, resistente y biodegradable. Como se explica en el libro 'Hongos', el proceso de creación de este "cuero vegano" consiste en hacer crecer el micelio sobre un sustrato de aserrín sólido. Posteriormente, se somete a procesos físico-químicos que aumentan su resistencia, densidad y elasticidad, logrando un material de consistencia similar al cuero animal.
Como bien se recoge en el libro, dos especies de hongos, Phellinus ellipsoideus y Fomitella spp., son utilizadas en la producción de este material. "A diferencia del cuero de origen animal, este cuero fúngico es capaz de soportar temperaturas cercanas a los 250 °C sin degradarse", menciona Eduardo Bazo en el texto. Empresas como MycoWorks y Ecovative Design ya han patentado métodos de fabricación de este tipo de cuero fúngico, posicionándose incluso como referentes en el sector.

Otros materiales sostenibles inspirados en la naturaleza
Además del micelio fúngico, existen otros materiales que están revolucionando la industria textil gracias a la biotecnología:
- Piñatex: un material elaborado a partir de fibras de hojas de piña, que imita la textura del cuero y se ha convertido en una alternativa popular en la moda sostenible.
- Brewed Protein: desarrollado por la empresa japonesa Spiber, se trata de una fibra inspirada en la seda de araña, pero producida de forma sintética mediante fermentación de microorganismos.
- Algodón reciclado y fibras de celulosa: materiales obtenidos de residuos textiles o de celulosa vegetal, promoviendo la economía circular y reduciendo el impacto ambiental de la industria textil.
Una revolución en la industria textil
El libro 'Hongos' destaca que la industria de la moda es responsable del 20% del desperdicio de agua en el mundo y del 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, se estima que la Unión Europea genera anualmente casi 6 millones de toneladas de residuos textiles, de los cuales el 60% está compuesto por materiales plásticos. En este contexto, el desarrollo de materiales sostenibles como el micelio fúngico y otros biomateriales es una solución viable y necesaria.

Este ejemplar no solo nos muestra la relación entre la micología y la moda, sino que también ofrece un recorrido por el papel fundamental de los hongos en la naturaleza, la ciencia y la innovación. Con un enfoque divulgativo y ameno, esta obra invita a descubrir el potencial de estos organismos en ámbitos tan diversos como la gastronomía, la medicina y la tecnología. Si te interesa la moda sostenible y quieres conocer más sobre cómo los hongos están revolucionando distintos sectores, este libro es una lectura imprescindible.