Carne de pollo para una dieta sana
Hacer deporte y llevar una dieta saludable son las claves para estar en forma. Cuando hablamos de dieta sana, un alimento que no puede faltar es la carne de pollo.
Hacer deporte y llevar una dieta saludable son las claves para estar en forma. Cuando hablamos de dieta sana, un alimento que no puede faltar es la carne de pollo. Seguro que has visto a gente que hace deporte y que basa su alimentación, fundamentalmente, en el pollo, pero ¿qué propiedades tiene? ¿Hasta qué punto es bueno convertirlo en el plato estrella de nuestras comidas?
Beneficios del pollo
Las propiedades del pollo son las responsables de su éxito. Se trata de una carne muy baja en grasa, rica en proteínas y aminoácidos, lo que la convierte en una buena fuente de energía. Además, su aporte de hierro refuerza nuestro sistema inmunológico y el fósforo que contiene es el “chute” que nuestro cerebro necesita. Son sus vitaminas, sobre todo la B1, la que vela por el buen funcionamiento del sistema nervioso y el corazón. Además, aporta a nuestro organismo el ácido fólico necesario para que nuestro cuerpo pueda hacer frente a enfermedades cardiovasculares. Se puede cocinar pollo de muchas maneras y, a nadie se le escapa, que la forma de prepararlo influye directamente en su nivel de salubridad. La pechuga de pollo al horno o a la plancha, es la forma más común de consumir este alimento cuando se está intentando adelgazar. ¡Ojo! Es preferible quitarle la piel que recubre la pechuga, ya que almacena mucha grasa.
Ni mucho ni poco
Comer pollo es beneficioso para cualquier persona, ya que aporta casi el total de la cantidad de proteínas diarias recomendadas para un adulto, pero tampoco es necesario acabar “cacareando”. Es decir, hay que buscar el término medio. Entre 200 y 400 gramos de pollo al día es lo recomendable para un adulto. Si eres una persona que hace deporte de forma habitual puedes aumentar tu consumo diario hasta los 500 gramos, ya que tu cuerpo necesita más proteínas por el alto desgaste físico. Si te pasas de esa cantidad es un error. Piensa que ninguna dieta debe basarse en un único tipo de proteínas ni de alimentos. No hagas la “dieta del pollo” y excluyas las verduras, el pescado o los huevos de tu nutrición, ya que, a la larga, es perjudicial. ¿Quieres saber qué recetas sanas de pollo puedes hacer? No te pierdas nuestra galería.