Muchas veces es mejor recurrir a lo clásico, lo que una sabe que sí o sí funciona, a probar decenas de productos nuevos que, aunque bien pueden acabar siendo la panacea, también pueden convertirse en un gasto absurdo. Una reflexión extrapolable a muchos ámbitos que cobra más sentido aún si nos referimos al mundo de la belleza.
Pasa, por ejemplo, con las clásicas latas azules de Nivea. Una crema hidratante que lleva décadas con nosotras y a la que siempre volvemos una y otra vez a recurrir porque sabemos que funciona. También pasa con la Suavina, por ejemplo, uno de los bálsamos de labios más vendidos desde hace años, o con la Talquistina.
Y es que esta crema hidratante de farmacia lleva décadas con nosotras es famosa por calmar la piel, especialmente la más sensible. Algo que de cara al verano y a las odiadas rozaduras en los muslos nos viene que ni pintado. Porque desde que empieza el calor y los pantalones cortos, faldas y vestidos se hacen con nuestro armario, nuestras piernas empiezan a sufrir.
Talquistina, la crema que utilizaban nuestras abuelas y ayuda a aliviar el dolor de las rozaduras

Algunos de los trucos para evitar las rozaduras en los muslos más comunes incluyen utilizar culottes antirrozaduras o cremas antirrozaduras, para evitar la fricción entre muslos y no hacernos daño. Pero, ¿qué hacer cuando ya nos hemos hecho las rozaduras? ¿cómo podemos aliviar ese dolor tan molesto?
Lo ideal es hidratar la zona, ya que no deja de ser piel irritada por el roce, y evitar llevar prendas que favorezcan que estas zonas sigan rozándose (al menos temporalmente). Y una de las cremas más recomendadas por farmacéuticos para ello es la Talquistina.

Aunque la Talquistina tiene varios formatos, la más indicada para aliviar las rozaduras de los muslos es su versión en crema. Formulada con talco, calamina, lanolina, parafina y el característico perfume de la Talquistina, está pensada para "aliviar el picor en la piel irritada o sensibilizada por alguna causa externa".
Una de las mejores cosas de esta crema es que se absorbe muy bien, por lo que no tendremos del problema de tener que esperar, así como que a la vez que alivia la piel también la trata, acelerando la curación. Puede aplicarse hasta cuatro veces al día. Eso sí, nunca sobre una herida abierta.

¿Su precio? En Primor lo hemos encontrado rebajado: cuesta 11,35 euros 9,99 euros.
Otros usos de la Talquistina
Además de para las rozaduras de los muslos, también podemos utilizarla para picaduras de insectos (algo muy útil de cara al verano y a los odiados mosquitos), las quemaduras solares (puede ser un buen aftersun si no tenemos otro) o para después de depilarnos, por ejemplo.
Otras cremas de farmacia interesantes para las rozaduras de los muslos
Bepanthol SensiCalm

Un clásico donde los haya, esta crema de farmacia es una de las más recomendadas cuando de aliviar rozaduras se trata. Con pantenol y pro-vitamina B5 como activos principales, es ideal para un alivio rápido. 10,31 euros.
Cicalfate+ Crema protectora reparadora de Avène

Otro clásico de farmacia es esta crema de Avène que además de reparar la piel también tiene acción calmante y cicatrizante. 10,99 euros.