Para quienes adoramos las manicuras clásicas, el Instagram de Paula Echevarría es una absoluta fuente de inspiración. Cada pocas semanas, la actriz acude a su centro de belleza de confianza para hacerse un nuevo diseño en las uñas. Y si bien, últimamente, nos ha deleitado con manicuras francesas de lo más sencillas y refinadas, así como el modelo degradado baby boomber en supertendencia; esta vez, ha conseguido conquistarnos con un diseño monocromático espectacular.
La asturiana, de cara a la primavera, ha dejado a un lado a su gran aliado estilo francés para adentrarse en un tono no sólo totalmente afín a la estación, sino que también es uno de los que más de moda están este año: el burdeos.

El color granate, así como el rojo y el burdeos forman parte del estilo de uñas ‘Old Money’, es decir, una estética de manicuras con un punto de lujo y discreción que se rigen por diseños discretos, elegantes, de aires sofisticados y atemporales, lo que las convierte en la opción ideal para cualquier evento y ocasión. Aunque el punto clave en el que se marca la distinción es en los esmaltes, entre los que destaca el burdeos de la actriz asturiana.

Algo evidente durante la primavera –y prácticamente, todo el año– es que esta tonalidad derivada del granate deslumbra un glamour inigualable, además de ser una de las tonalidades enfocadas a lucir una mano más rejuvenecida y esbelta, según los expertos.
Aunque el crear una mano y manicura con un efecto visual más joven también tiene que ver la forma de uñas elegida por Paula que, casi siempre, opta por la almendrada. Este estilo provoca una sensación de dedos más largos y suavizados ofreciendo una apariencia más delicada y femenina. Además, su curva suave y puntiaguda aporta un toque de sofisticación.

Aparte, al alargar visualmente la uña, hace que las manos parezcan más estilizadas y juveniles. La suavidad de los contornos también contribuye a una sensación de armonía y equilibrio estético.