Al igual que ocurre en el mundo de la moda, el universo olfativo tiene sus propias joyas atemporales, y entre ellas brillan con luz propia las fragancias almizcladas con olor a limpio. Esas que sugieren elegancia, discreción y sofisticación sin estridencias. Perfumes que no necesitan anunciar su presencia con estruendo, sino que se insinúan como una segunda piel pulida y sensual. En ese selecto grupo, Cashmere Mist Eau de Toilette de Donna Karan es una leyenda viva. Desde su lanzamiento en 1994, ha conquistado generaciones de beauty lovers con su estela suave y reconfortante. Este 2025 celebra nada menos que 31 años, y lo hace en plena forma, reivindicándose como uno de los mejores perfumes cítricos con olor a limpio de todos los tiempos (aunque ya te avisamos que el punto cítrico es muy poco perceptible).
Cashmere Mist Eau de Toilette de Donna Karan, la mítica fragancia por la que no pasa el tiempo
DKNY, una de las firmas emblemáticas dentro del universo olfativo
Donna Karan New York —DKNY para las iniciadas en la materia— ha sabido traducir el espíritu urbano de Manhattan en perfumes icónicos desde los años 90. Su primera fragancia vio la luz en 1992, y desde entonces, la marca ha lanzado más de 180 perfumes en colaboración con algunos de los nombres más potentes de la perfumería como Alberto Morillas, Calice Becker, Anne Flipo o Jean-Marc Chaillan. Detrás de Cashmere Mist Eau de Toilette está Nicholas Calderone, nariz que supo interpretar a la perfección la idea de un aroma soft but sensual que evoca lujo táctil y calidez íntima. Porque sí, este perfume está inspirado en la sensación de envolverse en un jersey de cachemira recién lavado, alzándose como una de esas fragancias discretas y elegantes para no avasallar con tu presencia.
¿A qué huele esta Eau de Toilette?
La fórmula de Cashmere Mist Eau de Toilette es un equilibrio magistral entre limpieza, calidez y textura. Abre con una nota de salida de bergamota, brillante y cítrica, que da paso a un corazón floral y suavemente empolvado. El jazmín y el lirio de los valles aportan luminosidad mientras la gamuza introduce una faceta táctil que recuerda a la piel desnuda. Pero el verdadero carácter se revela en el fondo: madera de cachemira, almizcle, sándalo, ámbar y un toque de vainilla. Es ahí donde esta fragancia se vuelve inolvidable. No invasiva, pero persistente; discreta, pero con personalidad. Un perfume que huele a "piel limpia" y que arrasa esta temporada, especialmente entre las que buscan ese efecto de "acabo de salir de la ducha".
El confort sofisticado de una segunda piel olfativa
La evolución sobre la piel es deliciosa: nunca proyecta en exceso, pero se percibe con claridad, como si emanara de tu propio cuerpo. Esa es la magia de su composición: un aroma envolvente que te acompaña sin eclipsarte. Bajo nuestro punto de vista, es genial para ir a la oficina, reuniones importantes o incluso para dormir, porque tiene ese poder reconfortante de una manta suave sobre los hombros. Por eso no sorprende que siga siendo uno de los más vendidos en su categoría después de tres décadas. Para muchas fragrance lovers, es el perfume al que siempre vuelven tras probar otros más complejos, recargados o trendy. Una elección segura, pero jamás aburrida. El precio varía en función de la plataforma de compra. Por ejemplo, en Brasty el coste es de 66,10 euros por 100 ml.
Otras Eau de Toilette en las que reina el almizcle
Original Musk de Kiehl’s
Original Musk de Kiehl’s tiene legiones de fans desde su lanza,miento. Su apertura con flor de azahar y bergamota es luminosa, chispeante y ligera, una bienvenida que da paso a un corazón floral cremoso con ylang-ylang, neroli, azucena y rosa. Pero es en el secado donde se desvela su alma: un almizcle envolvente, acompañado de pachulí y haba tonka que lo anclan con calidez y profundidad. Precio: 57 euros.
Coton Musc de Durance
Más delicado, pero no menos adictivo, Coton Musc de Durance recrea el olor a ropa limpia recién salida del armario con una composición floral-almizclada que acaricia la piel. Sus notas de salida (heliotropo, flor de almendro y peonía) aportan frescura cremosa, mientras el corazón floral de rosa y violeta le da cuerpo sin excesos. En el fondo, el almizcle vuelve a hacer de las suyas acompañado de benjuí, vainilla y un toque de sándalo que aporta calidez. Precio: 37 euros.
