La técnica EMDR ha demostrado ser útil para una gran variedad de problemas emocionales , desde ataques de pánico hasta traumas de apego o trastornos de ansiedad. Aunque en ocasiones anteriores ya hemos visto cinco estrategias para mejorar tu autoestima diariamente según los psicólogos, puede que esto no sea lo más adecuado, según cada caso. En esta entrevista, Rosario Linares, directora de El Prado Psicólogos de Madrid, nos muestra una perspectiva detallada sobre cómo funciona esta terapia, sus beneficios y la manera en que puede adaptarse a las necesidades específicas de cada paciente. Por ello, incluir esta técnica en nuestra terapia puede convertirse en uno de los hábitos recomendados por una psicóloga para cuidar la salud mental.
¿Para qué tipo de problemas o trastornos suele utilizar la terapia EMDR?
Empezó a utilizarse para tratar el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Sin embargo, su aplicación se ha extendido también a otros problemas, incluyendo ataques de pánico, trastornos de ansiedad, trastornos de la alimentación, adicciones y el dolor emocional asociado con experiencias perturbadoras. No tienen por qué ser grandes traumas. Muchas veces en consulta no nos encontramos con sucesos impactantes, sino con traumas de apego, traumas que se producen en la infancia dentro de las relaciones familiares, situaciones donde nos hemos sentido abandonados o heridos emocionalmente, donde nuestras necesidades de cariño y protección no se han cubierto, y a través de las cuales hemos establecido creencias sobre nosotros mismos, como "no soy suficiente".
¿Cuáles son los posibles beneficios de esta terapia?
Uno de los principales beneficios es su capacidad para alcanzar resultados positivos en un periodo relativamente corto en comparación con otras formas de terapia. Al centrarse directamente en la memoria traumática y alterar la forma en que el cerebro la procesa, puede disminuir rápidamente la angustia emocional del paciente. Además, no depende de la tarea tradicional de terapia de "hablar" y puede ser útil para aquellos que tienen dificultades expresando sus experiencias traumáticas. Otro beneficio importante es que trabajamos el problema a nivel emocional, no sólo racional, por lo que obtenemos cambios realmente profundos y perdurables en el tiempo.

¿Cuánto tiempo suele durar una sesión de terapia EMDR y cuántas sesiones podrían ser necesitadas?
Una sesión típica dura aproximadamente 50 minutos, aunque hay ocasiones en que necesitamos 90 minutos para reprocesar el contenido traumático. El número de sesiones necesarias varía dependiendo de la historia individual del paciente, pero los problemas a menudo se tratan en un promedio de 12-15 sesiones.
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios?
Algunos pacientes, sobre todo con traumas graves, pueden experimentar emociones intensas o revivir memorias traumáticas olvidadas durante las sesiones, por eso es muy importante el papel del psicólogo a la hora de acompañar al paciente en el proceso. Los efectos secundarios pueden incluir ansiedad, fatiga, sueños inusuales o recuerdos que afloran fuera de las sesiones. Estos efectos son temporales. El trauma es como una herida sin cicatrizar, lo que hacemos con EMDR es "cicatrizar" las heridas emocionales.
¿Cómo se personaliza el enfoque EMDR?
Considerando su historia clínica, necesidades personales y capacidad para tolerar la angustia emocional. Cuando el paciente viene muy desregulado emocionalmente, normalmente empezamos estabilizando con otras técnicas hasta que está preparado para empezar a trabajar con EMDR.
¿Cuál es vuestro enfoque para la gestión de la seguridad y el bienestar emocional del paciente durante el proceso de EMDR?
En El Prado Psicólogos priorizamos la seguridad del paciente asegurándonos de que estén bien informados sobre el proceso, comprendan los posibles efectos secundarios y tengan estrategias de afrontamiento en su lugar. Durante las sesiones, estamos atentos a cualquier señal de angustia intensa y estamos preparados para intervenir.
¿Para qué casos concretos la terapia EMDR ha sido efectiva en vuestros pacientes?
He visto resultados muy positivos en multitud de casos: sobrevivientes de abuso infantil y de maltrato, personas que han sufrido bullying o han experimentado pérdidas dolorosas, personas con ansiedad o problemas de autoestima y pacientes con fobias específicas.