En los anteriores capítulos de 4 estrellas, confirmamos que las desgracias nunca vienen solas y, si no, que se lo pregunten a Paula. Primero, su marido Diego se enamora de su amiga Marta. Ahora, quien ella pensaba que era su padre ha sido asesinado, para después descubrir que no era verdaderamente hija de Rafael. Y, sin embargo, ha heredado todas sus deudas. Pero, entonces, ¿quién será su padre biológico?
Apenas han transcurrido unas horas de tranquilidad desde el entierro de Rafael, la familia Albalad está tratando de rehacer su vida con la mayor normalidad posible, cuando, de repente, la realidad les golpea con fuerza. Ha llegado el momento de que Leo haga frente a su turbio historial empresarial y fiscal. Parece que la situación vuelve a complicarse.
Además, se avecinan cambios en el horizonte para el hotel Lasierra. Y es que Clara se está planteando un movimiento que puede cambiarlo todo, con el fin de apostar por el futuro de Sara en Estados Unidos
Marta y Diego, que han roto ya sus respectivas relaciones con los hermanastros, viven libremente su amor. Pero quizá deberían tener algún cuidado, ya sabemos que en Vera del Rey las alegrías duran muy poco. Las relaciones parecen estar más que gafadas y puede que su oasis de amor, terminer convirtiéndose en un infierno. Bien lo saben Miguel y Angelita, que, ilusionados con su incipiente romance, se van a topar con el regreso de Rosa, la ex mujer de Miguel.

En Vera del Rey se están celebrando felizmente las fiestas del vino cuando, de golpe, un estruendoso accidente acaba con Diego estrellado en el suelo tras caer desde una gran altura. Tristán y él habían mantenido una discusión previa con Paula de por medio, ¿habrá tenido algo que ver? La cacería de presuntos culpables de lo ocurrido no tarda en dar comienzo.
La Guardia Civil se pondrá manos a la obra para investigar lo sucedido, ahora con el refuerzo de Andrea, un carabinieri italiano que resulta ser primo de Menchu. Mientras tanto, desde la aparición de Rosa, Angelita ha decidido dar un paso atrás en su relación con Miguel. Pero, ¿cuál es la intención del nuevo regente del Chelsea? ¿Qué le dice su corazón?