¿Cuáles son las salsas con más calorías? Te lo pensarás a la hora de elegir ensaladas con acompañamiento
Hay salsas que son muy populares, pero también muy calóricas. Te contamos de cuáles debemos reducir su consumo.
Uno de los mitos más generalizados sobre las dietas es que una caloría equivale a una caloría y que la pérdida de peso es tan fácil como la entrada y la salida de calorías en nuestro organismo. Pero, en realidad, 200 calorías vacías de Doritos no son lo mismo que 200 calorías de verduras y frutas, al menos en lo que respecta a nutrientes. Otro de los inconvenientes de los que muy poca gente es consciente, es que puedes agregar calorías no deseadas y gramos de azúcar, sodio y grasa a tus comidas en un abrir y cerrar de ojos. Incluso si eliges una ensalada rica en vitaminas y proteínas en lugar de una hamburguesa de McDonalds, existe una gran posibilidad de que estés agregando a tu plazo aderezos con alto contenido en grasa y azúcares.
Lamentablemente, las salsas pueden a representar gran parte de las calorías de una comida. La mayoría de los aderezos y salsas compradas en tiendas o preparadas en restaurantes tienen mucha grasa, azúcar y otros ingredientes innecesarios que pueden agregar un exceso de calorías a tu dieta. Las salsas pueden parecer una pequeña parte de la comida, pero cuando se suman, pueden ser el punto de inflexión entre exceder tus metas diarias o no. Especialmente si comes fuera de casa o compras alimentos procesados con frecuencia.
Lo reconocemos: amamos todas las salsas habidas y por haber, aunque al mismo tiempo seamos más que conscientes de que nutricionalmente hablando no aportan demasiado -son básicamente un complemento para dar más sabor y consistencia a nuestras comidas- y de que suponen unas cuantas calorías extras en nuestra alimentación. Pero lo cierto es que, el valor nutricional de las salsas es tan importante como el de cualquier otra comida, ya que, como aderezos, también hay veces que nos olvidamos de que pueden aportar a nuestro plato calorías vacías. La mayoría de las salsas se realizan con una base de aceite o mantequilla, y es por ello por lo que suelen ser condimentos muy calóricos, aunque se consuman en poca cantidad (apenas 100 gramos). Además, las salsas no caseras -que son las que más se consumen- tienen altas cantidades de azúcar y aditivos, algo que las hacen todavía menos recomendables para nuestra salud.
Es el caso, por ejemplo, del ketchup. El ingrediente principal de esta salsa, probablemente la más consumida en el mundo- es el tomate, un alimento a priori de lo más sano. El problema es que el ketchup que compramos y que consumimos fuera de casa lleva mucho azúcar añadido, lo que termina convirtiéndolo en toda una bomba calórica muy perjudicial. Algo similar ocurre con la mayonesa, o la salsa rosa, que es una combinación explosiva de ambas. Además, solemos consumir estas salsas con comida basura, lo que no ayuda.
Otras salsas como la mostaza o la salsa barbacoa son algo menos calóricas, pero tampoco conviene abusar de ellas. Si te gustan mucho estos aderezos y no estás dispuesta a renunciar a ellos, intenta decantarte, en la medida de lo posible, por sus alternativas naturales y caseras. Elaborar las salsas en casa es relativamente fácil y en tu cocina tendrás el control sobre los ingredientes, logrando un resultado mucho más sano.
Y si aún quieres comprar y consumir las salsas prefabricadas, al menos sigue leyendo para conocer cuántas calorías tiene cada una de ellas. La salsa césar, la salsa roquefort, el alioli... Igual cambias de opinión después de esta galería.

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Ketchup

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Salsa roquefort

Salsa andalouse

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Salsa césar

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Salsa rosa

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Aceite

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Salsa pesto

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Mayonesa

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Mostaza

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Alioli

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